Leía alguna vez que la primera obligación del Estado es tratar de usted al ciudadano. Creo que se lo leí al maestro Espada. Sigo con el Fuego y las cenizas, de Ignatieff. Una atinada reflexión sobre la crisis y sobre toda esta situación que no termina de irse:
"Cuando el Estado liberal no trata a los ciudadanos con respeto, estos concluyen que cuanto menos tengan que ver con él mejor, y cuanto menos tienen que ver con el Estado, más bajos quieren que sean sus impuestos"