Hoy os quiero hablar de una de esas tendencias que me parecen favorecedoras, lo digo así porque hay tendencias que me resultan todo lo contrario y de esas prefiero no hablar.
La tendencia en cuestión tiene que ver con el mundo de los accesorios de pelo, y me resulta interesante porque una cosa mínima se puede convertir en el complemento perfecto que resalte nuestro look y por supuesto nuestras facciones.
Da igual que seas rubia o morena, que las horquillas sean las negras de toda la vida, del color de tu outfit o por el contrario que rompan radicalmente con él, el caso es que la horquilla es un accesorio it de esta temporada que ya empezó a verse en la anterior capitaneada por Cacharel y Michael Kors.
Las hemos visto en las pasarelas, en alfombras rojas, en las cabezas de it girls y actrices, con brillantes, de carey y hasta las más sencillas en sus dos versiones (para rubias o morenas).
Muy favorecedor el peinado de Teresa Helbig para este otoño-invierno que podéis copiar con unas simples horquillas.
Y lo mejor es que sientan bien para pelos cortos (estilo Bob) o largos, se pueden utilizar para sujetar un mechón, destacar unas ondas, en un recogido o simplemente para retirar el pelo de la cara.
También se llevan en grupo, dotando al estilismo de ese toque punk tan de moda, como pudimos ver a Julianne Hough en la Gala Met.
O en la colección de Juana Martín para que vimos en la pasada MBFW de Madrid para este OI-2014
Me gustan todas pero me quedo con algunas de Palos pelos, marca que el año pasado apostaba por la tendencia asiática, como:
Modelo Atenea para pelos largos.
El modelo Gala en sus versiones gold y silver
Modelo Barroco para medias melenas, cabellos muy finos o semi recogidos.
O las horquillas Doggy para las más pequeñas reluzcan
Despido este post con una frase de Audrey Hepburn que me inspira y espero que os inspire también: “La belleza de una mujer no está en la ropa que usa, la figura que lleva, o la forma en que peina su cabello”.
Aunque lo cierto es que ella sabía sacarse todo el partido y brillar como nadie.