El ritmo de endeudamiento de España es brutal y pronto estallará la nueva burbuja

El banquete de los políticos no cesa y Rajoy se está endeudando a un rítmo superior al de Zapatero. Todo vale con tal de que no le falte dinero a la casta. La deuda de España pronto alcanzará el cien por cien del PIB y compromete ya a las tres próximas generaciones de españoles, que estarán obligados a pagar impuestos altos y a dedicar gran parte de la riqueza de España a pagar intereses. Algunos creen que la deuda disparada por un Rajoy que también en este capítulo incumple lo que prometió y supera en estupidez a Zapatero, es una burbuja que un día no lejano estallará y precipitará a España en otra crisis de dimensiones colosales.

Superada la crisis de deuda, España se financia cada vez más barato, con un interés creciente por parte de los inversores, al tiempo que su nivel de endeudamiento amenaza con rebasar la marca psicológica del 100% del PIB. Los estados soberanos han emitido ingentes cantidades de deuda y ya deben un 80% más que antes de 2007. ¿Durará para siempre el apetito de los inversores por los bonos estatales, o nos encontramos ante otra burbuja?

Lo que es cierto es que los políticos se están dando un banquete a costa del pueblo. Para que a ellos no les falte dinero, la deuda crece y obligará a las próximas generaciones a realizar grandes sacrificios, pagando impuestos elevados y dedicando una parte importante de la riqueza a pagar las deudas de los dos presidentes mas nefastos de la España moderna: Zapatero y Rajoy, detrás de los cuales están dos partidos, el PSOE y el PP cuyo balance de daños causados a España es estremecedor.

España jamás había estado tan endeudada como ahora. La deuda de las administraciones públicas españolas cerró 2013 en 960.640 millones de euros, un 93,3% del PIB. La tendencia a subir parece imparable, mientras al frente del gobierno estén tipos insaciables e incapaces de ser ahorradores y austeros. Se prevé que durante este 2014 alcance la cifra redonda del 100% del PIB, con lo que rebasará, tan sólo en su valor nominal, sin contar los intereses, toda la riqueza que la nación puede generar en un año. Esto supone, en perspectiva, que la deuda que soportan las arcas públicas se ha más que duplicado desde que estalló la crisis.

Muchos economistas ven un inmenso riesgo en el endeudamiento veloz y frívolo de España. Sostienen que la deuda es otra burbuja para salvar los muebles tras la explosión de la burbuja crediticia. En cualquier caso, el mundo sigue avanzando en su loca carrera hacia un futuro incierto, sin salidas lógicas y plagado de amenazas y situaciones inéditas.