Revista Infancia

El salón de las consolas portátiles desconocidas (I): Gamate

Por Juan Carlos Fernández

Inauguramos la sección de consolas desconocidas con este proyecto que vio la luz en 1990 por parte de la empresa Taiwanesa Bit Corporation a rebufo, como otras muchas imitaciones provenientes de Asia (fundamentalmente Taiwan y Hong Kong), de la Game Boy, lanzada un año antes. Se distribuyó fundamentalmente en Asia y EE.UU, así como en algunos países de Europa como Reino Unido, Alemania e Italia, pero yo nunca la llegué a ver en España.

El salón de las consolas portátiles desconocidas (I): Gamate

A decir verdad, la Gamate fue una de las consolas asiáticas creadas específicamente para competir con Game Boy de más calidad, tanto por el hardware utilizado como por los materiales quedándose, desde el punto de vista técnico, muy próximo a la portátil de Nintendo.

El salón de las consolas portátiles desconocidas (I): Gamate

Contaba con una CPU de 8 bits, al igual que la Game Boy y una memoria RAM de 16Kb, el doble que la de Nintendo. La pantalla era casi un calco a la Game Boy, tanto en tamaño 2.6″, como en color (LCD no retroilumiado de fondo verde y gráficos de color negro) y resolución 160 x 152. Sin embargo, la calidad de pantalla no era ni mucho menos igual. Por regla general los gráficos en movimiento eran ciertamente borrosos y se difuminaban bastante, lo cual empeoraba bastante la calidad gráfica y hacia del juego una experiencia bastante deficiente.

El salón de las consolas portátiles desconocidas (I): Gamate

Por lo demás la consola estaba fabricada en un plástico resistente muy parecido al de Game Boy, si bien el diseño de la misma era totalmente diferente, mucho más parecido a la Game Gear (de forma horizontal), aunque con un aspecto más “de juguete”. Sólo se fabricó en color gris con botones amarillos y naranjas.

El salón de las consolas portátiles desconocidas (I): Gamate

En el aspecto del catálogo de juegos, lo cierto es que no fue demasiado extenso, pero tampoco se quedó en un número raquítico, ya que se dice que llegaron a unos 70, si bien algunos de ellos nunca se comercializaron fuera de Asia. Otra cosa era la calidad de los mismos, que no era para tirar cohetes. En general la mayoría de juego eran copias o clones de los de Game Boy, con una calidad bastante más baja y, en algunos casos, plagados de bugs.

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