Revista Decoración
Ya sabéis que estoy en casa de mis padres, me encanta recorrer y curiosear la casa, ya que todo es antiguo y vintage, siempre encuentro rinconcitos con encanto para fotografiar, hoy estamos en el saloncito
El saloncito es una estancia de transito que va a dar a la zona de las habitaciones, cuando mi hermana y yo traíamos amigas a casa y teníamos que hablar de cosas de chicas, este era nuestro rincón favorito, en él nos tomabamos un cafetito descafeinado y alguna cosita rica para picar.
Lleno de detalles preciosos, como la antigua lamparita de alabastro, esta muy delicada, casi intocable, es una delicia mirarla, junto su compañero inseparable, un espejo en bronce de tocador.
El gran cuadro de flores secas, fue un regalo que le hizo a mi madre una amiga suya hace muchos años, él preside el saloncito desde que yo tengo uso de razón.
El centro con plumitas y la vela fue un regalo mio, a mi madre le encantó, ha estado bailando de habitación en habitación, hasta que por fín encontró su sitio.
Hace tiempo que os comenté que mi madre pinta al oleo, siempre, siempre flores, los cuadros que están sobre la lampara son de ella, ha sido autodidacta, me encanta ver que en cada cuadro se nota como ha ido evolucionando.
La cómoda de caoba también la he visto en casa desde siempre, es un mueble de la familia con muchísimo encanto, el gran espejo de bronce es una pieza artesanal espectacular, comprado por mi madre hace mas de 30 años, en una tienda ya desaparecida en Zamora en la que se vendían espejos y lamparas muy especiales hechos a mano.
Este es otro de los rincones del saloncito con piezas antiguas, las sillas tambien de la familia, por parte de mi padre.
Aquí esta la polvera que prometí traer, las polveras de mano, es un objeto que a mi madre le gusta mucho, cuando encontré esta no lo pensé, sabía que era para ella, ya hice un post sobre la polvera, si la quieres ver mejor pincha aquí
Que paséis una bonito semana, yo seguiré disfrutando de estos días! Hasta pronto!!