Por: Miquel UoDT a las 11:25 Etiqueta: Three Lions 0 toques Los pobres resultados del United con Moyes al frente con un juego que pocas esperanzas daba a revertirlos a medio plazo provocó una decisión que, a mi por lo menos, me sorprendió cuando el club inglés decidió poner fin a la etapa del escocés al frente del primer equipo a pocas jornadas para que finalice el campeonato. 'La primera decisión deportiva de los Glazer' que habían vivido en una balsa de aceite (a nivel deportivo, por supuesto) bajo la figura de Alex Ferguson al frente que acaparaba todas las decisiones y responsabilidades del equipo, da para un debate nutrido sobre los plazos y exigencias después de que el equipo vaya a faltar a su cita con la Champions de manera matemática por primera vez desde 1996.
No tan sorprendente puede haber sido la decisión de elegir a Ryan Giggs como sustituto de Moyes para cerrar la temporada. El galés, historia viva del United, el fútbol británico y mundial, hacía ya un par de temporadas que ve como su participación en el equipo ha ido menguando, algo esperado, y reservada para momentos muy concretos ha podido realizar un 'clinic' que unido a su experiencia, le convertía en un candidato para este tramo tan complejo ideal: no tendrá exigencia, conoce al equipo, cuenta con el apoyo casi devoto de la grada y, quien sabe, si la imagen y los resultados acompañan, podríamos estar asistiendo al inicio de una interesantísima carrera de manager de un icono del fútbol que liga la época más romántica del fútbol con la exigencia del fútbol moderno que nos está tocando vivir.
Por ello me quise acordar de su otro debut (una expresión rara cuando hablas de un 'one man club'). Fue un 2 de marzo de 1991, todavía el proyecto Ferguson no había dado muestras de lo que iba a llegar a ser y el joven Ryan era otro de los chicos de las inferiores que despuntaba (y que acabaría formando parte de 'The Class of 92'). Giggs, que entró ya con el 0-1, no pudo guardar un buen recuerdo de su primer partido con el United si de resultado se trata, ya que con el sobre el campo, el Everton hizo el 0-2 definitivo.
En esta ocasión el rival contra el que se estrenará puede que no tenga el potencial de aquel Everton, pero si una necesidad importante de puntuar y no ser un convidado de piedra a esta efeméride que nos regala la Premier.