El Senado Mexicano analiza iniciativa para mejorar condiciones del trabajo doméstico

El Senado de la República analiza una iniciativa de reformas a Ley Federal del Trabajo, a fin de garantizar mejores condiciones laborales a los trabajadores domésticos.
Los senadores perredistas Antonio Mejía Haro y Carlos Navarrete defendieron su propuesta, ante las injusticias que enfrentan los trabajadores domésticos a manos de sus patrones.
Recordaron que según la Encuesta Nacional de Ocupación 2010, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), existen dos millones nueve mil 411 personas dedicadas al servicio doméstico, de las cuales 189 mil 507 son hombres y un millón 819 mil 904, mujeres.
Por ello los legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) plantearon reformar la Ley Federal del Trabajo, con el fin de garantizar los derechos de los trabajadores domésticos.
El objetivo, detallaron, es proporcionarles certeza jurídica, permitir que las condiciones laborales coadyuven en su desarrollo, además que reciban educación, cuenten con descansos fijos y tengan acceso a los servicios médicos.
En un comunicado, Mejía Haro comentó que con su propuesta se obligaría al patrón a dar por escrito una lista de las actividades que el empleado debe realizar, las cuales deben ser únicamente inherentes al hogar.
Además de destinar un día de descanso por seis días de trabajo, con goce de salario íntegro y en caso de que el servidor decida no salir durante su día de descanso, éste no deberá ser molestado.
Asimismo el patrón no podrá descontar del salario en efectivo, los alimentos y habitación que den a sus trabajadores domésticos, e informará al trabajador los derechos y obligaciones que tiene conforme a la ley.
El legislador perredista resaltó que el empleador no podrá discriminar por cualquier motivo a los trabajadores domésticos ni interrumpir su descanso nocturno.
Tampoco podrá obligarlo a laborar el día de su descanso o durante el periodo vacacional, ni impedir que se exprese en su lengua o que abandone sus costumbres culturales.

Fuente