El SEO es malo

Quizás pueda sonar muy agresiva esta afirmación, y quizás debería cambiarla por algo como “Si de Google empiezas a depender demasiado, mal acabarás”, pero cuanto más lo pienso más peso le doy a esta afirmación, y es que una cosa es no descuidar nuestra optimización de cara a buscadores, y otra muy distinta que se prime frente a todas las necesidades de nuestro negocio online.

Está claro que dependiendo de nuestro tipo de negocio y objetivos estratégicos, en cada caso el SEO tendrá más o menos peso, pero en general las estrategias que tiene solo en cuenta este aspecto, que son unas cuantas.., tienden a, por un lado acabar creando para el negocio una dependencia insana de los buscadores, tanto sean sitios de contenidos como blogs profesionales, que al final sin el posicionamiento no obtienen tráfico y por tanto no se rentabilizan porque su única fuente de ingresos que suele ser AdSense, en vez de preocuparse de proporcionar contenidos de calidad y originales que la gente les guste leer y vuelva para leerlos o recomienden, rentabilizándolas de forma adecuada mediante patrocinios, como webs corporativas/tiendas donde priman la optimización de su site pesando solo en los buscadores, frente a la usabilidad que necesitan los usuarios, etc.

El SEO, y con este post no quiero molestar a ningún de los tantos amigos SEOs que tengo, es una disciplina más del marketing, a la que Google con herramientas como Analitycs, Herramientas para Webmasters, y demás, nos hace creer que le debemos más de lo que en realidad le debemos.

Yo fui de los primeros en interesarme por el SEO cuando surgió y leer blogs y más blogs sobre el tema, leía todo lo que se publicaba al respecto, y era el primero en experimentar y estudiar siempre la mejor forma de aplicarlo y beneficiar a mis proyectos con sus logros para aparecer en las primeras posiciones de los buscadores, pero señores, no nos engañemos.. no sirve igual en todos los casos y en muchos otros se confunde su finalidad y su abuso va en detrimento del objetivo final real que la estrategia de marketing aplicada debería buscar.

Un sitio web de contenidos que únicamente tenga en cuenta los buscadores, conseguirá paracaidistas, y no parroquianos, y si su modelo de negocio se basa en AdSense y le importa un pepino el resto, el día que Google se levante con el pié izquierdo, la posición conseguida y el éxito de su sitio le seguirán detrás pagando las consecuencias. Y es que no se puede apostar nuestra estrategia online a una sola carta, y menos si esa carta es el caprichoso y despiadado Google.

Si en vez de eso, resulta que cuidamos el diseño, los contenidos, la experiencia de usuario, el trato con la audiencia, el social media, y todo el conjunto.. Resulta que estaremos invirtiendo en nuestro mayor valor, nuestra marca, es decir estaremos haciendo branding. Algo que al paso del tiempo queda, desde luego, mucho más que las posiciones en los resultados de Google.

Ahora hace un tiempo tenemos el social media en boca de todos, pero el social media también se puede usar para seguir uno u otro objetivo y siempre dependiendo del que busquemos obtendremos, lógicamente.

Lo que está claro, es que en Internet nos ocurre demasiado a menudo que nos cegamos con la novedad y convertimos la tendencia en lo único, hasta el extremo, en vez de aprender a usar cada herramienta y su mejor uso buscando la mejor combinación.

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