Ya desde los años 1950, se les ha pedido a las parejas realizar una serie de experimentos, se les ha colocado monitores de ritmo cardíaco, se ha tomado la presión sanguínea, se ha facilitado máscaras de oxígenos y demás parafernalias al copular, para cuantificar científicamente el impacto del sexo. La atención se centra a menudo en si el sexo te puede matar de un ataque al corazón. Felizmente para todos nosotros, estos estudios han demostrado que la frecuencia cardíaca aumenta durante el coito pero a niveles tolerables, en los hombres se incrementa en 21 latidos por minuto y en la mujer, 19. Como curiosidad se ha detectado que las pulsaciones se elevan más cuando el acto es extramatrimonial.
Sin embargo, el sexo como ejercicio es un tema en gran parte inexplorado, hay mitos como que “el sexo quema 100 calorías por sesión” más nunca nadie se ha puesto a prueba esto, de hecho, la cantidad puede ser muy variable debido a factores que todos conocemos, como la duración, esfuerzo, cambio de posiciones y un sin fin de etcéteras.
Para determinar si se puede categorizar el sexo como ejercicios, se ha reclutado a 21 parejas jóvenes comprometidas y se les ha hecho correr en la cinta durante 30 minutos para monitorizar su gasto energético y otros factores con el fin de compararlo con las exigencias físicas del sexo, esta actividad fue determinada como 1 MET (Unidad metabólica) para luego ser comparada con la actividad sexual. Posteriormente, las parejas fueron equipadas con un discreto brazalete que se encarga de supervisar el esfuerzo en términos de calorías, durante el siguiente mes las parejas se dedicaron a tener sexo al menos una vez por semana utilizando los brazaletes supervisores, y rellenaron un cuestionario donde anotaban como se habían sentido durante la actividad sexual, tanto psicológicamente como físicamente, sobre todo en comparación con la cinta caminadora.
Cuando los investigadores analizaron los datos resultantes, el sexo se clasificó como un ejercicio moderado, con una actividad de 6 MET para los hombres y 5,6 MET para las mujeres, eso es equivalente a jugar un partido de dobles de tenis o caminar cuesta arriba. Para comparar, el jogging es una actividad más intensa, con una Medida de 8,5 MET para los hombres y 8,4 para las mujeres, aunque algunos hombres, según los monitores de actividad, son capaces de utilizar más energía durante breves periodos de tiempo durante la actividad sexual. El consumo calórico promedio por minuto fue de 4 minutos en los hombres y 3 en las mujeres en sesiones que se extendieron desde los 10 minutos hasta 57, incluyendo los juegos preliminares (el promedio fue de 25 minutos), para comparar, haciendo jogging los hombres queman 9 calorías por minuto y 7 las mujeres.
En general, los datos han revelado que el sexo, puede ser considerado en ocasiones, un ejercicio significativo, lo más curioso del test, es que un 98% aseguraron sentirse mejor y divertirse más manteniendo relaciones sexuales en vez de utilizar la cinta de correr, supongo que el otro 2% estará de regreso en el mercado de las citas rápidas.
Seguro que más de uno nos acabamos de dar cuenta, que hemos encontrado una manera agradable de hacer ejercicios, espero lo disfruten y cumplan las pautas del experimento
Este artículo fue publicado el 8 de diciembre del 2013 en la revista The New York Times, bajo el título “Sexercise“
Ilustración | Matt Dorfman