Al darse cuenta de que todos los del comedor contemplaban el sombrero, Harry también lo hizo. Durante unos segundos, se hizo un silencio completo. Entonces el sombrero se movió. Una rasgadura cerca del borde se abrió, ancha como una boca, y el sombrero comenzó a cantar:
"Oh, podrás pensar que no soy bonito,pero no juzgues por lo que ves. Me comeré a mí mismo si puedes encontrar un sombrero más inteligente que yo.
Puedes tener bombines negros,
sombreros altos y elegantes.Pero yo soy el Sombrero Seleccionador de Hogwarts
y puedo superar a todos. No hay nada escondido en tu cabeza
que el Sombrero Seleccionador no pueda ver. Así que pruébame y te diré dónde debes estar.
Puedes pertenecer a Gryffindor,
donde habitan los valientes.
Su osadía, temple y caballerosidad
ponen aparte a los de Gryffindor.
Puedes pertenecer a Hufflepuff,
donde son justos y leales. Esos perseverantes Hufflepuff
de verdad no temen el trabajo pesado.
O tal vez a la antigua sabiduría de Ravenclaw,
si tienes una mente dispuesta, porque los de inteligencia y erudición
siempre encontrarán allí a sus semejantes.
O tal vez en Slytherin
harás tus verdaderos amigos. Esa gente astuta utiliza cualquier medio
para lograr sus fines.
¡Así que pruébame! ¡No tengas miedo!¡Y no recibirás una bofetada! Estás en buenas manos (aunque yo no las tenga).Porque soy el Sombrero Pensante."