Revista En Femenino

El suelo pélvico

Por Mamiclic

En los últimos años habrás oído cada vez más que es importante para las mujeres cuidar el suelo pélvico. Es posible que incluso te suenen palabras como Kegel, hipopresivos o bolas chinas.

Hoy conocerás un poco mejor esta musculatura tan desconocida, en parte por estar oculta y por ser hoy en día un tema tabú.

¿Exactamente que es el suelo pélvico?

El suelo pélvico es un grupo de músculos, como su nombre indica se encuentran en la zona baja de la pelvis.

La gente suele creer que la pelvis por abajo es ósea, pero es una cavidad hueca que tiene esa musculatura flexible, la cual permite soportar los órganos que hay dentro (incluyendo un feto) sin que se pierda la posibilidad de abertura (en la micción, defecación, o incluso para que salga un bebe en el parto).

¿Se puede lesionar?

Esta zona se puede lesionar por realizar determinadas actividades. El embarazo es una de ellas pero hay más: realizar ejercicios que causan impacto repetido en la zona, como es hacer running, volley, boxeo, crossfit…

Como consecuencia pueden producirse problemas como incontinencia urinaria, prolapsos, problemas a nivel sexual,…

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Lo cierto es que con la llegada de la menopausia perdemos más tono muscular, con lo que estos músculos se resienten aún más, y si existe un problema ya se hace más patente.

Recuerda: 1 de cada 3 mujeres tienen un problema de suelo pélvico.

¿Cómo saber sí tengo algún problema?

Hay varias formas de darte cuenta de que algo falla:

  • Si ante risas, estornudos, subir escaleras,…notas que podría escaparse pis.
  • Si tienes dolor en relaciones sexuales (por la episiotomía mal recuperada,…)
  • Si en las relaciones sexuales ya no sientes como antes
  • Si notas que “algo choca” con tu vagina” (por el descenso de los órganos).
  • Tienes dificultad para expulsar pis o heces.

¿Cómo puedo evitar los riesgos?

Conviene que tengas en cuenta una serie de factores que te pueden predisponer a lesionarte:

1.- Si practicas deportes de impacto regularmente (como running,) conviene que protejas la musculatura para evitar lesionarla: hacer ejercicios del suelo pélvico (Kegels, de movilidad de la pelvis, abdomen,… unido a otros como los hipopresivos) puede ayudarte a que esta musculatura esté fortalecida y no se resienta tanto.

2.-Además, el embarazo es una etapa clave para el suelo pélvico: tanto el peso del bebe sobre el suelo pélvico (más si es múltiple), como la postura que se adopta durante ese momento o la pérdida de la faja abdominal hacen que esa zona esté sometida a un gran sobreesfuerzo.

3.-Tras el parto vaginal suele resentirse esta musculatura aún más, sobre todo se pueden producir roturas musculares: desgarros y episiotomías son muy frecuentes y normalmente luego no se tratan (solamente se curan los puntos).

4.- Hay otras causas para que se lesione: la obesidad, operaciones quirúrgicas,….

¿Qué puedo hacer para evitar lesionarlo?

Por ello, para evitar los riesgos lo ideal sería entrenar el suelo pélvico incluso antes de estar embarazada, cuando ya sabes que quieres ser madre. En ese momento empezar a hacer ejercicios de Kegel o perineales puede ayudarte. En un próximo post prometo hablarte de cómo hacer ejercicios de kegel de forma eficaz y sencilla en casa ;).

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Por eso, el masaje perineal y los estiramientos específicos con o sin ayudas, como puede ser con un ejercitador para elastificar esta musculatura como con Epi-no

Una vez que has dado a luz, se trata de recuperar la musculatura dañada: además de ejercicios perineales, hay que fortalecer abdomen, los hipopresivos pueden ayudarte y te recomiendo acudir a un centro especializado en postparto para que te ayudan a trabajar la musculatura sin lesionarla (existen abdominales que te pueden ayudar pero otros pueden perjudicar aún más tu suelo pélvico).

¿Existen más ayudas para proteger el suelo pélvico?

En realidad hay muchas alternativas para el cuidado del suelo pélvico que las mujeres desconoce.

Incluso si tienes fugas siempre puedes evitar las compresas usando unos dispositivos que se aplican como los tampones: son más cómodos, los puedes llevar incluso en bikini porque no se notan, evitas olores y problemas de higiene y a largo plazo son más económicos porque algunos son reutilizables.

Si necesitas más información sobre el cuidado de tu salud pélvica, tienes la web www.saludpelvica.com con consejos y ejercicios para entrenarte. Si crees que tienes alguna patología, siempre es recomendable acudir a un profesional para que valore tu caso en concreto.


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