Revista Cultura y Ocio
El sueño reorganiza nuestras vivencias y preocupaciones, deseos, ilusiones, afianza conceptos....Durante el sueño se toman decisiones, se ama y se decide a quién odiar....resuelve ecuaciones...el sueño restaura el cuerpo y el alma, nos regala ilusiones descontroladas....baraja las cartas de la realidad para darnos la mejor jugada, construye castillos sin piedras....... y nos hace volar sin alas...como hijos de dragones...
Y en ocasiones jamás buscadas.....acaso halladas, la vida se entrelaza con sus secretos guiones, la vida se enamora de sus historias inventadas al azar, cumple promesas soñadas y descubre secretos ocultos tras sus jirones.
¿Qué si los pudiera atrapar? ¿qué si los guardase en una caja y los pudiera descifrar tranquila, despacio, sin prisas ni despertares, sin miedos infundados o con fundados terrores.....?
Y nos despierta a la vida de madrugada, como echándonos de la cama, nos baja a los infiernos mostrándonos la vacía faz de la cabra y tortura con inexistentes recuerdos de sangrientas farsas...Él se burla y nos hace creer que estamos despiertos cuando aún Morfeo mece nuestro indefenso ser de agua estancada sobre su ancho pecho de escarcha...
Son tan reales como la vida misma, son parte de ella, parte de nuestro ser.....ellos son un trozo de nosotros......Es indiferente si pertenecen al reino onírico o son nubes en blanco y negro.....Los sueños existen tanto como la mente, como los recuerdos....incontrolables, repetitivos, fantásticos, insoportables como la asfixia........quizá no estoy escribiendo, quizá es sólo un sueño....
pero ya está hecho...