Tras la suicidio de Hitler, la vida cambió en el búnker, cada uno de sus habitantes intentó salvarse por sí mismo. Al día siguiente, 1 de mayo, sucedió un hecho extremecedor, Goebbels (uno de los jerarcas nazis que mayor papel desempeñó en la historia del nazismo y mano derecha de Hitler) y su esposa Magda (fanática seguidora de Hitler) se suicidaron después de quitar la vida a sus seis hijos. Se llamaban Helga Susanne, Hildegard "Hilde" Traudel, Helmut Christian, Holdine "Holde" Kathrin, Hedwig "Hedda" Johanna y Heidrun "Heide" Elisabeth (todos sus nombres empezaban por H en honor a la primera letra de Hitler). Fue la propia Magda Goebbles la que les administró un somnífero y después una dosis de veneno. La mayor tenía 12 años, la más pequeña cuatro.
"No merece la pena vivir el mundo que viene detrás del Führer y del nacionalsocialismo. Por eso he traído aquí a los niños, porque sería dolorosa la vida que llevarían después de nosotros. Un Dios misericordioso me comprenderá si los libero yo misma". Carta de Magda a Harald, hijo de su primer matrimonio. 28 de abril de 1945.
“Nos los llevaremos con nosotros porque son demasiado hermosos para el mundo que se avecina”. Como justificación del envenenamiento de sus hijos.
La familia Goebbels con los seis hijos de su matrimonio. En la parte superior, esta Harald, hijo de Magda en su primer matrimonio con uniforme militar por estar en el ejército (parece que el uniforme fue retocado. Fuente: WIKIPEDIA
Los rusos descubrieron los cadaveres de los seis niños y los restos del matriomnio Goebbels y se los llevaron. Fueron enterrados en el cuartel general de la KGB en Magdeburgo en 1946. Mas tarde, en los años 70, el presidente de la KGB, Yuri Andropov, ordenó una incineración total de los restos. Sus cenizas fueron arrojadas al río Elba, otros sostienes que se arrojaron a una alcantarilla...