Todos hemos escuchado el slogan de Nike “Just do it”. ¿Y qué piensas cuando lo escuchas? Seguramente en algo motivador, en nunca darte por vencido, en seguir adelante. Bueno, pues aquí te presentamos el oscuro origen de esta frase que todos relacionamos con Nike.
Hace más de una década, el 10 de agosto 1998, Nike publicó el comercial que presentaba su famoso slogan «Just Do It», en donde un hombre de 80 años relata que corre todos los días más de 20 km por la mañana, y que cuando le preguntan cómo hace para que sus dientes no tiemblen, dice que los deja en el locker, para cerrar con la ya inmortalizada frase.
A todos nos suena motivador, una frase que te impulsa a seguir adelante, a no rendirte. ¡Pues nada más alejado de la realidad! La historia detrás de ella no tiene nada que ver con la superación personal, sino que tiene un antecedente muy siniestro. En realidad, la frase está inspirada en las últimas palabras de Gary Gilmore, un asesino estadounidense que fue condenado a muerte en 1976 por matar a dos personas en Utah. En esa época, era costumbre preguntarle al sentenciado cómo deseaba morir.
Loco de remate y con ganas de darse a notar, l asesino pidió que lo matara un pelotón de fusilamiento. El día de su ejecución, el 17 de enero de 1977, uno de los hombres que le dispararían le preguntó poco antes si tenía algo que decir, a lo que él contestó «let’s do it» (hagámoslo), y entonces le dispararon.
Diez años después de la muerte de Gilmore, Dan Wieden, jefe de la agencia de publicidad Wieden + Kennedy, fue el encargado de crear el nuevo slogan de Nike, inspirándose en las últimas palabras del asesino, cambiando solo la palabra let’s por just (solo), que junto, significa «solo hazlo», aunque en ese entonces no se dijo nada sobre su origen.
Años más tarde, confesaría el origen de este slogan. ¿Lo sabías?