Fue formulado por Alan Turing en 1950, en su artículo "Computing Machinery and Intelligente" (publicado en la revista Mind, versión original en este enlace). Una versión básica del mismo puede describirse así (Víctor Millán, "La habitación china: el experimento que va más allá del Test de Turing", en Hipertextual, 28 de julio de 2018, en este enlace):
- Un operador se comunica a la vez con una persona y con una máquina, a través de teclado o pantalla, sin saber cuál de los dos es humano o máquina.
- La comunicación se hace solamente mediante texto: el operador pregunta lo mismo (input) y recibe una respuesta de cada uno (output).
- Si el operador no consigue distinguir entre ambos, la máquina habrá pasado el test.