El Toro Jubilo

En Medinaceli un año más, los festejos de tortura al Toro, fueron los protagonistas de la noche. Y es que esta población, tal vez de Neandertales en su inmensa mayoría, tienen como costumbre celebrar sus festejos, con macabras torturas incendiarias similares a los ya conocidos como “Toros Embolados”, consistentes en poner material inflamable en las astas del toro, mientras los “valientes” del pueblo y turistas, corren delante del mismo.
Es realmente divertido, ver como para celebrar las fiestas de la localidad, un animal es prendido fuego, es estresado, quemado y vejado para uso y disfrute del pueblo. (IRONIA).
Parece mentira que en pleno siglo XXI, se sigan permitiendo estas prácticas inhumanas, prácticas propias de la Edad Media, o de la época romana. Visto esto, creo que sería totalmente ético, que la población se movilizara para pedir la vuelta a los fosos de gladiadores, y la pelea de los mismos contra leones.
Es cierto, que hay gente cuya vida depende de este tipo de prácticas, y del des-arte del toreo en sí, pero de igual modo que muchos consideran un gran reclamo turístico estos actos de maltrato, España, tiene muchas más costumbres, sanas y pacíficas, por las que atraer al extranjero como sus ferias y festejos, su historia, su cultura y monumentos, sus paisajes costeros y de montaña; y no el maltrato de animales, que para INRI, son considerados como símbolos nacionales.
¿Qué otros países queman y matan a su símbolo nacional? ¿EE.UU. mata a sus águilas? o ¿a caso en los países orientales prenden fuego a los osos panda? Estos actos no demuestran hombría ni valor, pues únicamente representan vergüenza ajena.
Si realmente, el echo de que no te guste que maltraten a estos animales, no es ser español, que me vayan quitando la nacionalidad…
Dani Ruiz