El trabajo extraordinario es inigualable

Las mejores cosas del mundo son aquellas que tienen un toque personal, pues cuando algo tiene un toque personal es porque quien lo hizo puso amor en su labor y ese amor le permitió generar algo irremplazable y extraordinario, por ello quizás una maquina programada realice miles de cosas pero jamás hará una sola cosa tan bien como una persona extraordinaria.
Todos somos únicos y tenemos un potencial ilimitado que nos permite realizar cosas únicas y grandiosas, solamente es cuestión de asumir nuestra identidad con amor porque nuestra identidad es la cualidad que nos permite darle nuestro toque personal a las cosas y el amor aquello con lo que logramos cosas imposibles. Los hombres extraordinarios son aquellos que aprenden en su vida a ser ellos mismos,  valoran su identidad y la aprecian cada día, todas las personas que dejaron un legado lo dejaron por ser ellos mismos no por tratar de ser como otros, por ello quienes se descubren a sí mismos lograran ser hombres extraordinarios y aquellos que traten de ser como otros olvidando su identidad serán hombres corrientes e imitaciones baratas y mal hechas de otros. Para que una persona revolucione su mundo primero debe revolucionarse a sí misma, cuando se revolucione a si misma será extraordinaria y siendo extraordinaria realizara cosas sin precedentes tan magnificas que superaran lo que realice cualquier otra persona e inclusive lo que haga una máquina.