Para quienes optan por lo natural, estos tres amigos míos les van a simplificar la vida: el aceite de ricino, el de almendras dulces y el de coco son mis aliados y salvadores. Pero atención muchach@s con acné: uds. no pueden ni deben usar aceites en el rostro, ya que la bacteria que lo causa es afín al medio oleoso.
Por un lado, para pestañas cortas y débiles, el aceite de ricino es lo mejor que me pasó en la vida. Mi mamá me lo colocaba cuando era chica por unas descamaciones en la zona de las pestañas y desde ese momento (bah, desde que mi mamá vió cómo me sanó y cómo fortaleció el cabello) se ganó un lugar en mi casa. Cuando me embaracé, perdí casi todas mis pestañas: me quedaron unas pocas y muy débiles. Con el aceite de ricino las recuperé. En este post ya hablé de las bondades de uno de mis aceites preferidos. Es bien denso, así que no recomiendo usarlo de día.
Mi otro aceite preferido, el de almendras dulces (en este caso, de Ewe) también tiene miles de usos:
- Para el cuerpo: es ideal para aplicar en las zonas más secas del cuerpo como las rodillas, codos y pies. Ydurante el embarazo, en la panza, para mantener la flexibilidad de la piel y evitar estrías. Para los bebés, es mejor aún que el óleo calcáreo y puede usarse también para realizar masajes shantala.
- Para el rostro: como desmaquillante, limpia la piel, restituye la humedad y elasticidad de la piel.
- Para las pestañas y cabellos: nutre, fortalece y ayuda a su crecimiento. En cabellos débiles y sin brillo, aplicar en las puntas antes del lavado. Dejen actuar por 10 minutos y enjuaguen. En las pestañas, se aplica todas las noches un poco. En la cabecita de los bebés, el aceite de almendras ayuda a ablandar la costra de leche que se les forma.
- Para las uñas débiles por tanto esmalte, un masaje con este aceite evita que se quiebren. Antes de colocarse la base o esmalte, enjuaguen bien. Me cambió las uñas y me resultó mucho mejor que cualquier otro producto comercial para fortalecerlas.
Y por último, el aceite más difícil de encontrar, el aceite de Coco. Pensé que en dietéticas lo iba a encontrar, pero sólo lo conseguí en el Barrio Chino, ya que en el país no parecen muy conocidas sus bondades. Granomadre ya no lo comercializa más (aunque tiene una variedad increíble de aceites diferentes), así que la peregrinación por esta botellita fue ardua.
Sirve como desmaquillante, y para mi, limpia más profundamente que el de almendras. También es bien acuoso y tarda en absorberse, pero si les molesta la sensación, siempre pueden usar algún otro limpiador después. Es muy eficiente para combatir el resecamiento, al igual que el óleo mineral, pero tiene mejor aceptación en la piel que el otro. También puede usarse en el cabello de forma pura o diluída en el acondicionador: puede aplicarse en las puntas abiertas cuando lo necesiten o si les molesta, dejándolo unos segundos antes de lavarse el cabello. Con pelo corto (donde las raíces y puntas son casi lo mismo) nunca noté en pelo angrasado como me pasa con el aceite de argán usando 3 a 4 gotas. Además, el Dr. Perricone lo utiliza hasta para las comidas (no sé si éste es el producto indicado, pero aviso para que lo tengan en cuenta).
¿conocían estos aceites? ¿cómo los usan en sus rutinas?