Revista Cultura y Ocio
En los últimos años, desde Argentina nos han llegado verdaderas maravillas cinematográficas que mezclan perfectamente la comedia con el drama. El mejor ejemplo de esto es la inolvidable El hijo de la novia, una tierna historia en la que un hombre que vive únicamente para su trabajo, siempre agobiado y de mal humor, recibe un toque de atención que le hace ver con mayor claridad sus prioridades en la vida. En esta misma línea, aunque de una forma mucho más agria, se desarrolla la ópera prima de Armando Bo: El último Elvis.
Carlos Gutiérrez es un imitador de Elvis que actúa en pequeñas fiestas y verbenas. Está tan inmerso en creerse otra persona que termina descuidando a su verdadera familia. Su mujer se ha divorciado de él, y lo único que aún les une es su hija, que está cansada del comportamiento infantil de su padre. Cuando por un incidente, Carlos debe quedarse con su hija ambos aprenderán a tratarse mutuamente.
Sin cargar innecesariamente las tintas, Bo consigue un tierno, emocionante y triste drama tremendamente humano. La joven Lisa Marie conseguirá que Carlos salga de su mundo de ficción, que madure y se dé cuenta de quién es realmente, que no es una gran estrella del rock, sino un trabajador argentino que tiene una familia que cuidar y que le necesita. El cambio será duro para Carlos, que aprenderá a ejercer de padre, mientras su hija conseguirá quererle tal y como es. El film argentino es sencillo, sin especiales pretensiones, pero todo lo que trata de abarcar lo hace excelentemente, creando unos personajes muy cercanos con los que resulta muy sencillo sentirse identificado o por lo menos compadecerte de su situación. Muy buena, un descubrimiento, habrá que estar atento a lo próximo de este director y no tenerle en cuenta su participación en el guión de la terrible Biutiful.
Cameo edita exclusivamente en DVD esta joyita que pasó por las salas de cine sin llamar especial atención. Si bien no contiene ningún extras más allá de fichas técnicas y trailer, en el que podemos ver imágenes no incluidas finalmente en el film, es una oportunidad imprescindible para todos aquellos que no tuvieron ocasión de verla en su paso por la gran pantalla.