Vamos a ser sinceros: Diciembre es una mes donde la espiritualidad ambiente promedio es más alta que en otras épocas. Conjugan en este mes varias fiestas importantes: Navidad, Januca y Festivus. Esto sumado al fin de año, el creer que realmente el año que viene cambiaremos todo lo que hace largo tiempo venimos prometiendo modificar y la ilusión de sacarnos de encima los reveses del año que pasó nos hacen estar mejor predispuestos a dar y recibir buenos deseos.
No se cuantos de ustedes festejan Januca(pocos, supongo) pero ya que los deseos y el espíritu navideño son moneda corriente y están al alcance de todos, decidí acercar un poco de deseos y espíritu januqueño (aunque suene más a oriundo de un paraje andino que a espíritu festivo).
Van mis 8 velas dedicadas:
a las situaciones que vivimos y nos ayudan a crecer . Hace tiempo comprendí que hasta lo que nos molesta y nos duele de alguna manera nos ayuda a crecer. Dicho en otras palabras: toda patada en el culo te impulsa necesariamente hacia adelante.
va dedicada a todos los que creen sinceramente que se puede traer luz a este mundo desde el acuerdo, la inclusión y el respeto. Para todos los que viven según el principio de pluralidad, no sólo desde el discurso. Aquellos que descubren en el ejercicio de escuchar y comprender al otro, un complemento de su propio ser.
para los que comprenden la diferencia entre encender para llevar luz y quemar para destruir. Parece simple, pero los últimos días nos demostraron, una vez más, que es un poco más complejo de lo que parece.
esta va para las tradiciones. Todas. Cada cual con la suya y todas aportando su parte para conformar esta trama humana de la que todos somos parte.
Queda una vela más. Es la vela que enciende a las otras. En mi caso, esta vela son mi mujer y mis hijos que me llenan de luz cada día y me enseñan a encontrar el brillo incluso en momentos que son o simplemente parecen oscuros. Gracias a ellos puedo celebrar esta fiesta de un modo que, más allá de milagros, me enseña la importancia de saber recibir y aportar luz.
Se que me salió demasiado serio. No se preocupen, espero corregirlo para la próxima.
Saludos y felicidades para todos, crean en lo que crean. Los buenos deseos, si son sinceros, siempre suman.