Para investigar tan extraño hecho, las Naciones Unidas destinan a un italiano, cuyo traductor local será el hilo conductor del relato. O mejor dicho, de los relatos que se cruzan en la muy sui generis investigación de Massimo Risi, que a la postre se verá totalmente superado por los especiales habitantes del lugar.
A ratos tremendamente divertida y otros llena -no de realismo- sino de surrealismo mágico africano, queda también espacio para que cale un buen repaso a la descolonización, a la revolución y a la corrupción como si fuesen la misma cosa, dejándonos un puñado de maravillosos personajes.
PD: En el ya lejano septiembre de 2007 recogía el comentario de los muy recomendables relatos de "O fio das missangas"
