La sede de Asemblea Nacional Catalana, (Carrer de la Marina, Barcelona) una buena mañana, apareció pintada … de graffitis … y obviamente no ocurre nada, nada a nivel mediático pues la fachada, totalmente pintada costará ayuda para devolverla a su estado original.
De haber amanecido pintada con símbolos nazis o fascistas hubiera salido en todos y cada uno de los medios de comunicación. Desgraciadamente la pintada es una gamberrada, un acto vandálico consentido o mejor dicho, aceptado con demasiada resignación. Otro tanto hubiera ocurrido con una pintada “gamberra” en la sede del PP, por citar un ejemplo de signo político contrario.
Puedes estropear una fachada y no ocurre nada … mientras no te metas en política. Sea del signo que sea, no te metas y así nadie te dirá nada.