El viaje de Javier Heraud.

El hallazgo de este documental, en el canal de los mismos por la señal vtr, fue realmente una sorpresa gratisíma y conmovedora. Me acuerdo que la primera vez que la vi, ya estaba avanzada la historia y no sé como que no puse mucha atención y pensé que se trataba de un documental biográfico que habían querido hacerlo en modo "artístico", en vez de entrevistar y conversar con sus más cercanos. Es decir, fui prejuiciosa antes de poner atención y por un pelo lo dejo pasar. Pero me contuve y buscándolo para grabar, dije "más adelante le daré otra oportunidad". Y ese día llegó de noche y fue realmente especial.Lo que más pensaba mientras lo veía era el hecho no menor que tiene la historia literaria de América Latina, de no visibilizar "demasiado", aquellas figuras que están muy ligadas a la izquierda. La izquierda consecuente, activa, presente. Porque en otros documentales biográficos de personajes literarios, como el ecuatoriano Marcelo Chiriboga, que tuvo una vida muy consecuente, pocos saben de su existencia y en el caso de Javier Heraud, ya simplemente el silenciamiento del que fue objeto es terrible.Tremendas personas, de esas que uno, yo, siempre he pensado que no fueron nacidos para vivir en este mundo. Siempre son los más nobles, los de alma generosa, los que se dan por completo, quienes finalmente terminan muriendo y quedamos nosotros jajaja.La historia de vida, acción y obra de Javier Heraud, es realmente para sacarse el sombrero y no dejar de hacer reverencias. Con tan solo 21 años, hizo de la poesía peruana un canto a la belleza. Creo que podríamos encasillarlo en el grupo de los poetas naturalistas, además de los poetas que no buscan que sus párrafos rimen, sino más bien en forma poética, metafórica, van contando una hermosa o triste historia, que termina siendo poesía.Así escuché algunos de sus versos en el documental, comparando su vida y qué decir con su muerte, y la naturaleza, la belleza de los verdes peruanos, de sus selvas tropicales, de los espacios urbanos. Hablando de los pájaros, de los animalitos, de las aguas con olas, quietas como laguna, fulgurosas como los ríos con cauce. Así también al amor, a los viajes, a los países diversos que conoció. Con razón la madre, la hermana, que salían entrevistadas derrochaban amor y devoción para Javier, porque así y todo, quedaban cortas. Que manera de haber sido maravillosa su corta vida.Y la consecuencia estuvo siempre presente, desde la generosidad en su familia, con sus hermanos, sus padres, después con sus compañeros de colegio, de universidad, con Nena la chica que amó y a quien no quiso dejar amarrada a un destino incierto y ella atesoró sus cartas, los poemas que le dedicó. No hay una sola persona, que lo haya conocido, que dijera un comentario que no fuera halagador, pero no halagador barato, de lambiscón, sino que halagador de embelesamiento, de no poder saber cómo sobrevivió tantos años, sin haber vuelto a saber, escuchar, hablar, ver, a Javier Heraud. Realmente fue una persona que marcó a quienes conoció.Y en el trayecto que el director del documental hace, a través de la sobrina nieta de Heraud, uno va encontrándose con aquello tan lindo y triste que produce el saber que a pesar que él ya no está y que fue asesinado de manera horrenda, la semilla del socialismo, de solidaridad, humanidad, compañerismo, generosidad, que él dejó en la tierra, fue cosechándose en los niños que lo recuerdan, quienes cuidan su tumba, su familia que no lo olvida, los amigos que tampoco lo olvidan y han divulgado su poesía, su trabajo, su trayectoria. Creo que aunque no sabemos si él puede verlo, es la mejor forma de saber cuando has vivido de la manera adecuada, más que eso, cuando has hecho de tu vida, el mejor trabajo de conciencia, solidaridad, humanidad. No sé tengo la impresión que son poquísimas las personas que han pasado por este mundo, que pueden si quiera imaginar que iban a dejar tal huella.También hay que destacar y lo hago, el trabajo documental del director, Javier Corcuera, realmente todos los respetos, porque quien pone el ojo en alguien tan especial como Heraud y convierte su vida en este documental maravilloso, que mientras más gente lo vea, le pasará como a mi, que no podrán quedar indiferentes y algo se les removerá en su interior, creo que con eso, estás pagando con creces a la memoria de un grande, un gran hombre, humano, poeta, peruano, Javier Heraud.Totalmente recomendado!!!
SINOPSIS:

Ariarca Otero, sobrina nieta del poeta Javier Heraud (1942-1963), decide abrir el baúl de los recuerdos y reconstruir la historia de su tío abuelo acribillado en el río Madre de Dios a los 21 años, privando a la poesía peruana de una de sus voces más personales y originales. Desde la mirada de Ariarca, que también tiene 21 años, conoceremos más de cerca la vida y obra del poeta. Ese baúl custodia una historia que ella conoce poco. Heraud escribió su obra poética desde los 18 hasta los 21 años. Mediante su poesía y las cartas, Ariarca descubre los viajes de Javier a París, Moscú, Madrid y la Habana, allí descubre también cómo Javier entró a militar en un grupo guerrillero en los años 60 que logró entrar a Perú a través de Bolivia por la selva y que fue acribillado después de rendirse, la joven conocerá a algunos testigos de los hechos. Desapareció así una de las voces más valiosas de la poesía del Perú y pasó a ser el eterno poeta joven, el llamado Rimbaud de la poesía peruana.

CALIFICACIÓN:

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FICHA TÉCNICA:

Título original: El viaje de Javier Heraud, Perú, 2019.

Duración: 96 minutos

Dirección y guión: Javier Corcuera.

Música: Pauchi Sasaki.

Fotografía: Mariano Agudo.

Género: Documental, biográfico, literatura. 

mi septima pasion