El mundo: “Aumenta a 17 el número de ingresados por el virus del Ébola”.
El País: “EL aeropuerto de Nueva York usa pistolas térmicas para detectar Ébola”.
RTVE: “La OMS cifra en casi 3.000 los muertos por el Ébola en África Occidental”.
Son noticias como estas, las que llevan preocupando a España y al mundo entero especialmente en el último mes, pero, sabemos realmente que es el virus del Ébola…y cuáles podrían ser las consecuencias de su expansión.
En primer lugar quisiera explicar brevemente el origen del virus del Ébola, sus formas de propagación, sus consecuencias en los seres humanos y las posibles “curas” de la enfermedad que causa.
La afección producida por el virus del Ébola es una enfermedad infecciosa viral aguda que produce fiebre hemorrágica en humanos y primates, el virus del Ébola en si es uno de los más mortíferos que existen, y se detectó por vez primera en 1976 en dos lugares diferentes simultáneamente: en Nzara (Sudán) y Yambuku (República Democrática del Congo). Una de las aldeas, en las que, al parecer se originó, estaba situada cerca del río Ébola, y de ahí tomó su nombre.
El virus del Ébola perturba un tipo de células llamadas “endoteliales” que recubren la superficie interior de los vasos sanguíneos y afectan la coagulación. Al ser atacados los vasos sanguíneos por el virus, las plaquetas no son capaces de coagular, y los pacientes sufren un shock hemorrágico que deriva en una pérdida muy grave de sangre.
Este virus se contagia entre humanos por el contacto directo con la sangre u otros líquidos de una persona viva infectada y que presente ya síntomas de la enfermedad aunque también de personas muertas por la enfermedad.
También puede producirse el contagio del virus del Ébola por exposición a objetos de enfermos o muertos que hayan sido contaminados, como prendas de vestir o ropa de cama. Afortunadamente no se transmite ni por el agua, ni por el aire.
Lo que todavia no se ha podido determinar con exactitud es cómo infectó el virus del Ébola por primera vez a un ser humano.
En cuanto a los síntomas de la enfermedad los primeros que aparecen son: fiebre repentina y alta, debilidad intensa y dolor de cabeza, muscular y de garganta, todo ello seguido de vómitos, diarreas, erupción cutánea, funciones renal y hepáticas alteradas e intensas hemorragias internas y externas.
Generalmente los síntomas aparecen entre los cinco y diez primeros días tras el contagio aunque el periodo de incubación puede llegar a los veintiún días.
Todavía no se cuenta con ningún tratamiento específico ni con ninguna vacuna eficaz, no obstante, se están poniendo a prueba varios sueros experimentales.
La fiebre hemorrágica causada por el virus del Ébola es una de las enfermedades más peligrosas para el ser humano, con una tasa de mortalidad que puede alcanzar el 90%, de hecho, debido a su naturaleza letal, este virus es considerado como un arma biológica.
Una vez entendido brevemente el virus del Ébola y sus consecuencias, me gustaría extenderme algo sobre qué medidas deberían ser tomadas tanto a nivel internacional como a nivel nacional.
En mi opinión, creo que no es conveniente que los gobiernos trabajen como lo están haciendo en muchos casos individualmente, ya que esta enfermedad podría convertirse en epidemia y afectar al mundo entero. Creo que sería conveniente organizar una reunión internacional a la mayor brevedad, en cual se sentasen a hablar los gobiernos, tanto los ya afectados como los que todavía no lo han sido junto con los mejores médicos del mundo en el área de la virología y las enfermedades infecciosas para poder buscar una solución global. Es cierto que, desconozco todas las medidas que están tomando los diferentes gobiernos pero creo que por una vez los departamentos de salud de la Unión Europea, USA y las Naciones Unidas deberían de trabajar cómo una sola entidad.
En el ámbito nacional, de nuevo según mi opinión, España cuenta con medios suficientes y excelente profesionales especializados en tratar enfermedades como el Ébola, situados en el Hospital La Paz de Madrid y en el Hospital Clínico de Barcelona y deberían de estar en disposición de ralentizar la propagación del virus, hasta que se encuentre una cura eficaz.
Además el Ministerio de Sanidad tiene un Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias desde el que se establecen los mecanismos para garantizar la salud pública, así como protocolos detallados de actuación.
Sin embargo, es cierto que a pesar de contar con Unidades de Atención y Aislamiento, no han sido capaces de seguir los procedimientos detalladamente, ya que como todos sabemos, desgraciadamente una de las auxiliares de enfermería que trataba a un paciente enfermo del virus del Ébola se ha contagiado.
Aun así, estoy convencido de que si estas normas se cumpliesen consecuentemente, serían las adecuadas…