Revista Cine
La prestancia de para dirigir de Zemeckis con momentos de “alto vuelo”
El director de Volver al Futuro y Forrest Gump, entre otros tantos títulos, nos presenta en esta ocasión un interesante drama acerca de la agudeza de las adicciones. Un piloto tan experimentado como pegado al consumo de drogas y bebidas alcohólicas (Denzel Washington) realiza una de las maniobras más extremas y prodigiosas que se puedan lograr bajo la conducción de un avión con desperfectos técnicos, salvando 96 de 102 vidas entre pasajeros y tripulantes de la aeronave. Lo que en teoría lo enmarcaría como un héroe comienza a ser opacado cuando descubren que el capitán tenía alcohol en sangre, problema por el cual éste podría caer preso. La película tiene un arranque impecable, con la escena del vuelo como arma fundamental y desbordante de tensión. Resulta muy atractivo el recurso que aplica Zemeckis para presentarnos a los dos protagonistas, intercalando la historia de cada uno de ellos a través de breves secuencias de lo que le está ocurriendo a uno y al otro. Treinta minutos apasionantes y bien encaminados para que luego el film empiece a sufrir un efecto declive al sumergirse en una trama bastante mansa y por momentos densa, en donde no sería extraño pedir a gritos un poco más de dinámica, de “punch”. Filmada impecablemente y con un relato muy interesante, El vuelo es una buena cinta que nos deja unas cuantas frases y conversaciones útiles para analizar y reflexionar acerca de situaciones extremas en la vida de un ser humano. Narra a la perfección la conducta de todo aquel que posee una adicción, con las mañas típicas y mentiras / excusas que suelen tener este tipo de sujetos, incontrolables incluso aún cuando su destino puede sufrir un cambio rotundamente negativo.
LO MEJOR: las actuaciones, la primera media hora, unos cuantos buenos diálogos. LO PEOR: el final podría ser mejor. Por momentos se percibe cierta pesadez. PUNTAJE: 6,50