Revista Cultura y Ocio
Eladio y los Seres Queridos aterrizaron en Costello Club con un repertorio de algo más de 90 minutos y con esa paz que les caracteriza, el concierto nos devolvió al dulce hogar que siempre les ha caracterizado. Cuando realizamos la entrevista con Eladio mientras se fraguaba la prueba de sonido, sabíamos que lo que llegaba era un concierto para paladear.
A las 22:00 empezaba en Costello Club el relato de una historia donde Eladio y sus seres queridos hablarían por todos, nos harían caer y subir, contarían con Pablo Perozo y Jorge Ojea en dos temas y la verdad es que lo que se fraguaba era distinto. No era un concierto donde se tocaría solo Historias de Caza pese a que Tormenta estaba al inicio. Lo cierto es que el nuevo disco estaba bien encajonado con canciones del pasado como Espanha a las 8 o sus canciones en Gallego (que fueron muy bien recibidas por una sala llena).
Pese a lo que pueda parecer, la aparición de Jorge Ojea en dos temas en Algún Iluminado aceleró el ritmo y dejó otros sentimientos en el tema que representa Historias de caza y es que pasaría lo mismo en Camino, los dos temas donde Jorge se subió para imprimir su esencia, su fuerza y demostrar que junto a los Seres Queridos el derrotero de una canción es recrearse y disfrutar, jugar al superlativo de sus opciones y dejarnos caer desde el rascacielos que se generan con cada acorde. De la misma manera, Pablo Perozo saldría en Ella y en una cumbia en el tiempo de descuento que pasó a ser la fiesta perfecta. Se demostró que este tipo de uniones es algo distinto y pusimos el ojo en Pablo como proyecto a tener en cuenta.
La leyenda del tiempo era el tema que cerraría el show, una canción que ejemplificaba un cierre por amor a la música y donde había un sabor dulce donde recordar como Carlota se fue, Historias de caza y Bou Vian habían crecido en estatus en directo. Lo cierto es que como conjunto son de lo mejor de la escena musical, conocen perfectamente sus sonidos y es que con sintes, guitara, bajo y batería crean las atmósferas perfectas para dejarnos llevar. Se debe felicitar a la banda y pedirles que vuelvan, anoche Costello Club demostró estar en familia y queriendo más de esta banda que siempre responde con su mejor show.
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