Aprovechando que he adquirido una caja con once discos del grupo, remasterizados y con bonus track, voy a hablar de uno de mis grupos.
Antes de nada, sé que esto es otra de tantas tomaduras de pelo de las discográficas, sólo para fanáticos como yo del sonido ELO.
Es cierto que por el pricio no está nada mal, pero creo que podría venir un poco más completo.
Estos discos salieron previamente, y de forma individual. Traían fotos inéditas y un libreto.
Aquí hay libreto, y los cd son una reproducción de los vinilos, pero no vienen las letras.
Aquí no están ni Xanadú ni Zoom. Y éste último no viene, porque, según leí, los derechos los tiene Jeff Lynne.
Aún así, el sonido remasterizado está muy bien comparado con las primeras ediciones de los discos en formato CD.
El sonido remasterizado en sí no me parece mal, lo que me parece mal es que (una vez más) las discograficas nos tomen el pelo, ya que desde que se editan discos en Cd es como tendrían que ser y no las chapuzas que muchas veces han puesto a la venta en formato digital.
Lanzado todo este rollo, me voy al disco que nos ocupa.
El grupo, con bastante éxito despues de El Dorado, álbum conceptual y muy sinfónico, Jeff y sus amigos lanzan en el 75 este disco más sencillo, menos cargado de arreglos...............pero igualmente maravilloso.
Por supuesto que sigue habiendo orquesta en los temas, pero éstos son aparentemente más sencillos (salvo One Summer Dream), más fáciles, sin que esta sea la palabra correcta para definirlos.
Estúpidamente a mí me gusta llamarle su álbum Folk.
Todos son buenos temas. Aparte de los clásicos Strange Magic y Evil Woman, están también las estupendas Fire On High, con esos comienzos tan enigmáticos característicos del grupo en sus lps, y esas baladas marca de la casa que me derriten como son Waterfall o One Summer Dream.
Tampoco falta sitio para la marchosa Poker, que tiene un sintetizador Moog de ensueño, la campestre Down Home Town o Nightrider con ese estribillo rítmico y esos buenos arreglos de cuerda que la relanzan de una mera prodigiosa, pues en otras manos, seguro que no pasaba de ser un temilla de relleno.
Otra parte importante es la portada, tal vez la más polémica del grupo, con la silla eléctrica en primer plano, y a tenor de la foto, con el humo encima de la silla, recién usadita.
Como pasó con The Beatles, Rolling Stones o Lez Zepelin, hubo siempre leyendas sobre sus portadas y que si ponías los discos al revés se oían mensajes satánicos.
Chorradas, vamos. Aquí la leyenda dice que en la contraportada (que es como si el grupo estuvies viendo la ejecución detrás de un cristal) el violinista Malvyn Gale miraba cara otro lado porque el estaba en contra de la pena de muerte.
También pudiera ser que le hubiesn esmagado un huevo justo en el momento de la instantánea, o incluso pensar "joder como le canta el alerón al amigo Kelly".
En definitiva, otra jilipollez más.
Por cierto, yo cuando pongo un disco al revés, independientemente de que me guste más o menos, sólo escucho un disco al revés. Lo siento, mi neurona no me da para oir nada más.
Sin ser su mejor disco, es otro gran disco de la ELO. Como no podía ser de otra manera.