Hoy os recomiendo una película que se ha estrenado hace dos escasas semanas en la cartelera española: “Elefante blanco”. Dirigida y guionizada por Pablo Trapero, la cinta ya ha cosechado un gran éxito en Argentina, país del que procede, y aquí se espera otro triunfo.

En Elefante Blanco se presenta un triple drama formado por un cáncer, una matanza y un triste entorno, donde la mayor parte de la población se encuentra abocada a la pobreza y a la droga. Allí, dos curas dedicados a la labor cristiana en el tercer mundo, Gerónimo y Julián, lucharán contra sus propias dudas y debilidades internas y contra los problemas sociales del barrio.
En esa contienda tendrán que enfrentarse a todo tipo de enemigos; la propia jerarquía eclesiástica, el gobierno y sus fuerzas policiales e incluso al narcotráfico. Estos serán algunos de los problemas en los que tendrán que arriesgar su vida y defender su compromiso y lealtad hacia los vecinos del barrio.

Trapero consigue dibujar un entorno en el que plasma de forma espectacular lo contrario y complementario, combinando los momentos de debilidad de sus personajes con momentos de grandeza.
Una magnífica película con tintes de documental donde la excelente interpretación ayuda a potenciar la crudeza de una realidad que no queremos ver.