Revista Cultura y Ocio

Elefantes, 30 aniversario en madrid: intercambio de energía y sueño cumplido [crónica]

Publicado el 17 abril 2024 por Alberto CaÑas @albertocmolina
ELEFANTES, 30 ANIVERSARIO EN MADRID: INTERCAMBIO DE ENERGÍA Y SUEÑO CUMPLIDO [CRÓNICA]

Tras protagonizar esta entrevista aquí y lanzar el triple disco recopilatorio 30 aniversario o tratado sobre jardinería, llegó la hora de celebrar estos 30 años de Elefantes en Madrid, en el Teatro Circo Price. Aunque finalmente no se colgó aquello de "todo vendido", el ambiente que se respiraba en el recinto, tarde-noche del 12 de abril, difícilmente podía ser mejor. 

Instantes después de las 20:00 horas, y tras anunciarse a través de la megafonía algo así como "señoras y señores, en el culo tengo flores", sobre el escenario aparecieron Jordi Ramiro (batería), Julio Cascán (bajo), Àlex Vivero (guitarra) y Shuarma (voz y guitarra). Muy puntuales y muy uniformados, de negro, de pies a cabeza, los cuatro juntos, iluminados bajo un foco, entonando Pretendes con el único acompañamiento de una guitarra. Así de acústico e intimista arrancó un concierto en el que, con la segunda canción, Cada vez, unas y otros entendimos que el grupo repasaría sus clásicos o no tan clásicos, pero de una manera diferente, precisamente con los nuevos arreglos que encontramos en 30 aniversario o tratado sobre jardinería. De hecho, Cada vez resultó más bailable que la versión original del álbum La primera luz del día.

"¡Buenas noches, qué ganas teníamos! Nos moríamos de ganas de volver a tocar aquí, ojalá seamos capaces de transmitir la emoción que sentimos desde el escenario. ¡Allá vamos!", y buena parte del público se dispuso a corear Que todo el mundo sepa que te quiero. Otro de los momentos más especiales del concierto se vivió justo a continuación, cuando Shuarma dio paso a esa letra escrita basándose en frases del histórico Charlie Rivel para "convertirnos por un ratito en payasos". "¿Tenéis ganas de cantar con nosotros?", y entonces se corearon a lo grande dos temas de amor, uno detrás de otro. El primero, Que yo no lo sabía, sobre "el lado bonito del amor",  y Duele, "para contrarrestar la anterior". Por cierto, Duele, palabra, con los nuevos arreglos sonó aún más intensa y sentida... tanto gustó, que incluso el solo de guitarra de Àlex se saldó con una merecidísima ovación. 

"Se suele decir que las mejores canciones surgen en los momentos más difíciles, esta es una de ellas", comentó Shuarma y, él solo, sentado al piano, empezó a dar buena cuenta de Hoy antes de que sus compañeros acabaran uniéndose a los coros. "Esta canción tiene unos cuantos años y queríamos hacerla tal y como fue ideada", y la canción en cuestión era Por verte pasar, para la ocasión con guitarra acústica, a solas el cantante de nuevo, incluso sonó flamenca por momentos. Tras una nueva ovación, al filo de las 21:00 horas, Shuarma reapareció sobre el escenario vestido de rosa y al son de Lo más pequeño. El público ya lo empezaba a cantar todo, aunque precisamente la siguiente, Somos nubes blancas, logró algo más levantando de sus asientos en la grada a un buen número de seguidores.

"Hoy nos acompaña alguien para la siguiente canción, una persona realmente maravillosa, Nacho Campillo", y con otro de los cantantes y compositores fundamentales del pop en castellano, disfrutamos de Al olvido, sin duda, entre los momentos estelares. "Y el cielo fue azul, tu mirada, azul, sentimiento azul. Despedí mi silencio azul, tu inocencia azul, nuestro abrazo azul...", no, no hubo un segundo de tregua tras corear Azul, porque llegó la hora de Te quiero, su siempre celebrada versión de José Luis Perales, con la segunda y última colaboración especial del concierto: "Y tenemos con nosotros una segunda invitada,  Anni B Sweet"

"Y con esta canción nos vemos a despedir esta noche, la única canción nueva que hay en este último trabajo. Gracias por mandarnos vuestra energía", y Shuarma, luciendo un último cambio de vestuario, no se podía referir a otra canción que no fuera Este amor. De no ser por él, algún despistado podría haber pensado que se trataba de otro clásico de Elefantes porque se cantó y bailó como tal. "Hemos ido un poco rápido, por el horario del Price, no he podido detenerme y hablar como me gusta en nuestros conciertos. Llevamos 30 años, hemos pasado momentos increíbles, hemos pasado por desiertos... pero siempre nos habéis sostenido y esta noche también, así que aquí va nuestro aplauso para vosotros. Nuestro sueño está cumplido, nos vemos en el 60 aniversario", y así, primero con Mis sueños y después con Piedad, escasos minutos antes de las 22:00 horas, acabó por todo lo alto la celebración.

Texto y fotografías: Alberto C. Molina

ELEFANTES, 30 ANIVERSARIO EN MADRID: INTERCAMBIO DE ENERGÍA Y SUEÑO CUMPLIDO [CRÓNICA]

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista