Edición Rockarte
Y vamos con un comentario del disco antes de la animación que anima a este posteo...
Desde hace varias semanas que recibí la promoción del álbum estoy enganchado a este nuevo álbum de los británicos ELEPHANT TREE. «HABBITS» tiene la capacidad de sacar de mí el tópico de: «Firme candidato a álbum del año». Ya sé que es una frase que escuchamos con demasiada frecuencia, pero después de oír este trabajo, estoy seguro que muchos la repetirán. Un álbum en el que se nota que se han cuidado los todos detalles, y que contiene unos temas perfectamente trabajados, lo que hace que su escucha sea una experiencia emocionante y catártica. Con un enfoque en el que los teclados y sintetizadores así como un mayor protagonismo de la segunda guitarra, hace que sus temas adquieran una tintes monumentales. Esa combinación de elementos pesados en los que el doom soporta las flotantes melodías, sobre desarrollos instrumentales entre la psicodelia, lo progresivo y el stoner es sencillamente perfecta. Si a eso una las magnéticas voces y coros, la tormenta perfecta está servida. Canciones como «Sails», un tema llamado a convertirse en un himno contemporáneo, hacen que «HABBITS» te enamore sin que puedas desengancharte. Los temas se desvuelven entre densas y oscuras atmósferas, pero sin embargo, suenan completamente cristalinos, lo que supone un plus de calidad. Así consiguen el perfecto equilibro entre la dulzura de sus melodías y lo turbio y pesado de sus ritmos, unos ritmos con un groovy ágil y fluido. La banda parece tomar una especie de elementos pesados de Pink Floyd, Melvins, o Deftones para combinarlos habilmente y provocar un efecto estimulante para proporcionarnos un viaje emocionante. Impulsado por sus voces cristalinas en vena shoegaze con ya hemos visto en bandas como King Buffalo, pero aún así, también hay pinceladas de psicodelia en línea Colour Haze u oscuros brochazos Sabbath entre algunos ritmos de metal. El resultado es un álbum celestial y melancólico de estos orfebres progresivos y pesados en el que todo suena nítido y ágil a pesar de que usan una estructura similar en la mayoría de los temas. Si estas palabras no te convencen, no sigas leyendo, pero escúchalo por tí mismo, no te arrepentirás.
ELEPHANT TREE son Jack Townley (guitarra y voces), Peter Holland (bajo y voces), John Slattery (sintetizadores y guitarra) Sam Hart (batería). «HABBITS» está disponible vía Holy Roar Records.
Una introducción («Intro») en la que el latido de maquinaria británica palpita ambientándonos para recibir a uno de esos temas que se convertirá en himno y será cantados por el público de todos los festivales en los que sea tocado por la banda. “Sails”, abre con la maquinaria a máxima revolución y el bajo moviendo las turbinas mientras la magnética voz nos arrulla con una delicada melodía que me recuerda a King Buffalo. Con un impecable sonido, resultante de una cuidada producción, todas las piezas parecen estar engrasadas para crear un corte mágico. Un tema que va modulando sus formas entre caleidoscópicos sonidos. Con precisas transmisiones la banda ensambla los arrebatos rítmicos, las pausas, y los pasajes sinfónicos. Todo fluyendo con naturalidad, sin forzar nada, consiguen crear un tema en el que pueden aparecen ecos Colour Haze, coqueteando con estructuras progresiva, voces en línea King Buffalo. Un sonido grueso y aparentemente difuso que se muestra sonando cristalino. El tema está lleno de coros angelicales y riffs borboteantes. Sencillamente impresionante, apuesto que será uno de los buques insignia de sus próximos shows, (cuando estos puedas celebrarse).
Con una apertura pesada y oscura, “Faceless” en tonos casi Sabbath, van creando un tema nebulosos con una melodía pegadiza gracias a la susurrante y cálida voz. Siempre bajo un manto psicodélico, los ecos de los noventa aparecen fusionándose entre atmósferas doom. Los pasajes heavy-psych no faltan a su cita con unas afiladas guitarras que tropiezan con obstáculos más propios del metal. Un pesado y aturdidor sonido que se amortigua con la placentera melodía en los momentos psicodélicos. Tambores retumbando y turbios ritmos que parecen ahogarse conjugan matices doom con sintetizadores creando un sonido que sobrevuela espectral entre cantos profundos mas propios de una banda progresiva. El corte es un terso y tupido tapiz sónico que acaba por envolvernos.
Poderosos riffs stoner cohabitan con los sintetizadores en “Exit the soul”. Una intoxicante y espesa neblina de la que emergen voces y coros celestiales. A pesar de la gran fuerza y pesadez del tema, consiguen encontrar el equilibrio con melodías a caballo entre el pop-shoegaze y espacios propios del rock progresivo. Lleno de épica, el bajo nos golpea con virulencia, golpes secos y contundentes con atronadores tambores, en contraste con la voz, la guitarra y los sintetizadores que sirven de bálsamo adormecedor que nos invita a un placentero sueño. Un sueño que nos traslada a un viaje sensorial por flotantes espacios lisérgicos. Lo liviano como preludio a una nueva embestida pesada, mientras nos hacen levitar por el espacio infinito. A veces puede ser complicada de describir esta combinación de doom, heavy-psych y progresivo que recrean en cada tema, pero, sin duda la mejor descripción es una buena y placentera escucha.
Cambiando de alguna manera el registro, “The Fall corus” es un tema de dark-folk con una atmósfera oscura que evoca momentos shoegaze y el pop psicodélico de los 50’s. añadiendo un nuevo elemento como son los violines generan una envolvente atmósfera que nada tiene que ver con la pesadez vista en los cortes precedentes. Los versos y coros operan como contrapunto entre sí.
Sin salir de las nebulosas, “Bird”, la cálida y oscura voz shoegaze brota en una explosión de sentimiento. Delicado, melódico, pesado, lisérgico, el tema muestra a la perfección las dos caras de la misma moneda que son en la actualidad ELEPHANT TREE. Suaves pasajes lisérgicos llenos de belleza se tornan misteriosos gracias a los efectos espaciales. Un escenario perfecto para que los sintetizadores construyan esa atmósfera psicotrópica. Con una estructura que acaba siendo recurrente, el tema conjuga la simbiosis entre lo poderoso y grave con esos ritmos pesados y densos, con las livianas y mágicas melodías vocales, siempre dentro de una atmósfera psico-progresiva. El corte culmina con una explosión de color, ritmo y sensaciones, que te acaba atrapando sin remisión.
“Wasted», con unas armonías llegadas de los noventa, nos llevan en volandas sobre esa firma y poderosa base pesada. Un turbio sonido que resulta esponjoso a su vez. Los hipnóticos y ácidos pasajes acaban siendo un bálsamo entre la monumentalidad rítmica. Sus construcciones vocales son perfectamente diseñadas para servirnos de masje entre los zumbidos. Un corte faraónico que construyen un castillo sonoro que me evoca voces y pasajes del pasado, que, por otro lado, me resultan completamente innovadores. Una seña de identidad de los británicos.
El álbum cierra con “Broken nails”, un tema en el que angelicales voces entre tímidos y susurrantes acordes acústicos en su comienzo, consigue hechizarnos. Una de las virtudes de ELEPHANT TREE, es la de ser capaces, tanto de la sencillez como desde la mas absoluta complejidad, tienen una efectividad a prueba de bombas. Ahora, sobre una atmósfera progresiva, el tema evoluciona cambiando su aspecto, para pasar de la calma a la tensión con gran habilidad. En cualquier caso, siguen manteniéndonos enganchados. Envolviendo con un manto mágico nos trasladan a una nueva dimensión sensorial que acaba disipándose en el infinito. Seguramente sea el corte más oscuro de un álbum que se desarrolla entre sombras.
Si no podés ver la animación, andá acá...
https://fb.watch/iSwf7G_S3A/
Si todavía quedan resquicios cerebrales a algunos de nuestros seguidores después de la odisea surgida con el nuevo de Oranssi Pazuzu, aún nos quedan dos días presentando otros dos discos tan esperados como el de los finlandeses, y que tendrán su punto de encuentro con muchos seguidores de ambas bandas durante el día de mañana, cuando se lance definitivamente a las calles.
Es curioso pero comparando estas dos incógnitas podemos ver pasado, presente y futuro entre ambas. Como una de ellas creció con un stoner/doom distintivo y poco a poco ha ido madurando en su estilo. La otra en cuestión, recuerda mucho a esta primera banda misteriosa, llevando ese mencionado heavy rock de naturaleza noventera y sumergiéndonos en texturas de los Floyd más atmosféricos, pero que sin duda, el carácter y mayormente su ADN, se ha corroborado definitivamente con este tercer lanzamiento suyo. Descubramos una de ellas en el día de hoy…
“Habits” es el tercer lanzamiento de los británicos, sin duda uno de los platos fuertes del primer semestre, gracias a un homónimo redondo con el que nos proyectaron al cosmos durante el 2016 (reseña aquí). Desde entonces, y sin desprestigiar un pedazo de inicio como fue aquel “Theia”, las cuatro piezas londinenses han sido uno de nuestros discos que más han girado en nuestros respectivos reproductores. Con ellos hemos flotado ante la inmensidad de la psicodelia pesada caracterizada por ellos mismos bajo un estilo único y dominante de tus sentidos. Ahora con “Habits”, obtiene una inmejorable continuación a la gesta facturada 4 años atrás.
Definitivamente este disco debería de posicionarlo de una vez por todas como uno de los grandes contingentes del stoner/doom europeo y viene en un momento inmejorable. Tal vez no sea para hacer números a la banda, pero estoy convencido de que cuando estos artistas británicos idearon todos y cada uno de los detalles de su nueva obra, supongo que lo habrán hecho en vista a la reflexión del oyente.
En un disco totalmente cautivador, el arrebatamiento de tu corazón con el nuevo “Habits” es inviable. Su potencial llevada en esa celestial distorsión nos lleva a un plano intenso dónde las melodías atmosféricas resuenan de una fuerza inigualable, derrochando ese vigor a plena potencia de la banda y penetrando en nuestras cabezas sus estrofas inolvidables. Así es, “Habits” es uno de esos trabajos predestinados a triunfar en el 2020, conforme siempre han ido creciendo tus expectativas en los meses atrás, tras el primer anuncio de su aterrizaje. Elephant Tree son definitivamente, sinónimos de garantía, y de esas pocas bandas que emergen de una fuerza sobre la superficie terrestre con el único destino de llevarnos a una travesía estelar, única y sin precedentes.
Supongo que los grandes discos, son aquellos que hacen despertar tus sentimientos. Desde el lado alegre o desde el triste, aquel que retuerza tus sentidos está provocando una inestabilidad presente en ti. De este mismo modo, “Habits” logra esa hazaña desde su primer asalto en “Sails”, descendiendo rápidamente por esa característica madriguera suya dónde los elementos psicotrópicos, la contundencia en la musculatura de sus riffs o la consistencia arrojada en sus densos surcos, nos llevan entre sus muchas vibraciones atmosféricas a un nuevo nivel de psicodelia pesada. Ese poder devastador, más propio de un martillo gigante, vuelve con la poderosa “Faceless”, un caso bastante similar a aquel “Aphotic Blues”, dónde su dominante groove nos lleva en ese pulso alternativo tan disonante como perturbador, pero ante todo, totalmente idóneo para obrar entre las vitrinas de los riffs mayúsculos del género.
Es verdad que la influencia Sleep está muy presente en los esquemas de Elephant Tree, pero es en esas ambientaciones dónde los ingleses se desmarcan y en casos como los de “Bird” nos llevan por otra grieta melódica tan pesada como inspiradora. “Exit The Soul” agrega diferentes capas a las muchas tonalidades en las composiciones de Elephant Tree, algunas desde el lado electrónico, y otras como esa épica similar como su cierre en “Broken Nails”.
“Habits” más que corroborar la factura distinguida de Elephant Tree, trae de vuelta a los músicos más pesados e intimidatorios que nunca. Dotado de una ambición que no parezca tener un techo que tocar, este álbum es una gran razón de peso sobre cómo no caer en monotonías o repeticiones varias y sí demostrar que un estilo como el stoner, más allá de los muchos matices o derivaciones a las que puede someterse, es un estilo ya clásico, pero no muerto, que puede tener un canto a la esperanza o un giro de tuerca más como nueva innovación como bien hacen estos alquimistas devoradores de atmosferas. Otro reajuste más del estilo bajo el empuje de las nuevas tecnologías en esta gran nube de ensueño que se recordará como uno de los grande hitos del 2020.
Podés escuchar el disco desde su espacio en Bandcamp:
https://elephanttreeband.bandcamp.com/album/habits
Web oficial:
https://elephanttree.band/habits
Facebook:
https://www.facebook.com/elephanttreeband/?tn-str=k*F
O tenés el disco completo en este video.