Entre los inconvenientes que tienen las cámaras réflex digitales es la suciedad en el sensor. Hoy os contamos algunos trucos para poder eliminar esas molestas manchas que nos persigues allá a donde vamos en nuestras sesiones de fotografía.
El hecho de que los objetivos sean intercambiables deja que algo de suciedad pueda entrar dentro de la cámara, y puede terminar depositándose en el sensor.
Hay una serie de reglas básicas (son todas y cada una de los pies en el suelo):
- En ambientes de mucha suciedad y polvo jamás quites la meta de tu cámara.
- En el momento de mudar el propósito ten la cautela de sostener el cuerpo de la cámara con la abertura del objetivo cara el suelo, para eludir la entrada de cuerpos extraños dentro del cuerpo de la cámara.
- Si tu cámara dispone de limpieza de sensor automática actívalo. Esto hace que el sensor vibre tenuemente para desprender las pequeñas partículas de polvo que se puedan depositar sobre el.
- Si el sensor prosigue sucio deberás meditar en limpiarlo, para ello:
- Comienza por adecentar el exterior con una pera de aire.
- Quita la meta y limpia la cavidad interior solo con aire.
- Levanta el espéculo (usando el modo perfecto de limpieza del sensor que estas cámaras tienen) de manera que el sensor queda perceptible y vuelve a emplear la pera de aire. NUNCA soples dentro.