Ella está viniendo
Con fuego en la cabeza y el arma en la mano:
Ceñida de gris, con las negras piernas heridas
Ella está viniendo
La cara sin color
Los cabellos rojo azul verde amarillo
Suavidad y enigma irradiando intemperie
Escucho el galope de su caballo furioso
Ella está llegando
Entreverada y amontonada como la hojarasca de otoño
Ella ha desmontado
La siento en la piel y la boca
Su humedad reverdece esta siesta dispersa
La tengo frente a mi
Sus ojos brillan
Como los reflejos dorados
del arma que lleva en la mano.