Revista Cultura y Ocio
Descubrí a esta autora con De los amores negados, para mí una novela muy especial, con mucha sensualidad y tratada con una elegancia extrema. Aunque he recomendado muchísimas veces esta novela, la verdad es que no le ha gustado a todo el mundo que la ha leído por recomendación mía. De Ella, que todo lo tuvo antes de leerla había leído criticas negativas e incluso muy negativas, escasamente alguna positiva, desde que era malísima, a que la autora no sabía escribir, y sobre todo que era la peor de sus novelas. No me creo ninguna institución en la materia, pero he leído con esta tres de sus novelas y tengo pendiente en la estantería de casa, la que la mayoría de los lectores coinciden en que es su mejor novela Lo que le falta al tiempo, y lo que si que puedo decir es que esta mujer tiene un dominio del lenguaje y de la escritura que muchos otros autores quisieran para sí.
Sobre la autora
Angela Becerra nació en Cali, Colombia, abandonó una exitosa carrera en el mundo de la comunicación, para dedicarse a escribir, su primer libro fue un poemario titulado Alma abierta, que no he tenido el placer de leer, le siguieron De los amores negados, El penúltimo sueño y Lo que le falta al tiempo, esta última sigue en mi estantería. Su última novela publicada, Ella que todo lo tuvo, ganó el Premio Planeta-Casa América en el año 2009. Desde 1998 Angela Becerra vive en España, concretamente en Barcelona. Su obra está siendo traducida a veinte idiomas y la autora es reconocida por la critica como la creadora del " idealismo mágico".
Si no conocéis su faceta periodística podéis pasaros por su blog en ADN.es. La editorial Planeta con motivo del lanzamiento de Ella, que todo lo tuvo, creo un perfil en facebook al que pueden entrar sus fan, y si te apetece verlo pincha aquí.
Toda novela tiene un porque, nace de una inspiración, la motiva un acontecimiento, una noticia, una persona, Angela Becerra en la contra portada del libro explica el porqué nace Ella, que todo lo tuvo y como me ha parecido interesante os lo transcribo. "Esta novela nació en Firenze, en un helado invierno de 2004, mientras saboreaba un dry Martini en el Harry´s Bar. La puerta se abrió y una ráfaga de viento helado trajo a una enigmática mujer. Durante unos minutos me dedique a observarla y mientras lo hacia emergió de nada esta historia. Tuve la convicción de que su vida era triste y que andaba perdida y resignada a su ostracismo. Aunque quizás nunca lo sepa quiero darle las gracias porque durante años fue mi inspiración y acompañó mi solitario trayecto de escritura."
Impresiones
Angela Becerra tiene un estilo muy peculiar, una prosa bella en la que se plasma su trayectoria poemática. Suele guardar un cierto equilibrio entre la prosa y el verso que hace que su literatura no empalague, domina a la perfección las figuras literarias, y sentarse en el sillón con un té, o una bebida refrescante según la época del año en que se deguste la novela es todo un placer al alcance de cuanto se cruce con sus narraciones.
Tengo que reconocer que tenía mis reticencias al comenzar este libro, las criticas que había leído no lo dejaban bien precisamente, aún así, pudo más mi experiencia como lectora y un día se vino a casa conmigo. A su favor se encontraba el lugar donde se ambientaba la novela, Firenze, soy una enamorada de Italia, creo que lo he dicho en alguna ocasión. Recuerdo Florencia con especial cariño, a pesar de los pocos días que estuve allí, algunos de los enclaves me resultaron conocidos, y eso ayudó a que la novela calara más dentro de mí. La autora se encerró para escribir durante dos meses en el mismo hotel que la protagonista vive su experiencia más amarga. La protagonista es una escritora, una amante de los libros que cuando se ve incapacitada para escribir se dedica a restaurarlos y a visitar librerías de viejo para estar en contacto con aquello que más ama. El tema: la soledad, la ausencia de ganas de vivir y sin embargo esa lucha denodada por seguir con vida, por ser feliz... Ay la felicidad ese bien tan escaso que pocos saben apreciar cuando pasa por su vera.
Los personajes están dibujados con guante blanco, son personas como cualquiera de nosotros, con sus alegrías y sus penas, con sus errores a cuesta, y enfermedades, en pocas palabras personas de carne y hueso con las que nos podemos sentir identificadas, y en muchas ocasiones yo me identifiqué con Ella, e incluso con el personaje del librero.
Encerradas entre sus líneas podemos encontrar toda una serie de reflexiones positivas casi todas brotan de la boca de un vagabundo, cuya cultura desborda todos los poros de su piel y parece que no encaje en el papel que se le asigna, hasta que conocemos su vida, para muestra un botón.
"_ Usted no es un vagabundo, ¿verdad?
_ Digamos que me jubilé de este mundo hace rato. Soy un ocioso. _ El hombre hizo una venia_ una gran profesión. Usted no sabe cuánto llega a enseñar la ociosidad...
Este vagabundo da el contrapunto a la novela, y para mí consigue que una novela de soledades, dura y triste se convierta en un arco iris en la que los personajes buscan salir de los claroscuros de su vida, que luchen por ahogar la tristeza, amargura y dolor que los invade, para procurarse una existencia mejor, como el despertar de un ave fénix.
Subyacen en el fondo de la novela otros temas que le dan credibilidad al papel de la protagonista, los abusos infantiles y las enfermedades mentales, y como no el amor, esa fuerza que todo lo puede. No la consideraría yo una novela romántica a pesar que el amor es uno de los ingredientes imprescindibles en las novelas de esta mujer, pero sabe mantener un equilibrio para que no resulté excesivamente almibarado. Junto al amor, la seducción y la sensualidad, escenas en las que el sexo está tan bellamente narrado que es un placer regodearse en sus líneas
Vamos descubriendo de a poquitos a los personajes, la autora nos dosifica la información que vamos teniendo de ellos y ningún dato es superficial, todo tiene un porque y termina encajando en el puzzle de la novela. Pasear con ella por los enclaves de esta ciudad italiana es todo un placer. Y como siempre no olvida poner algún detalle histórico que apuntale la trama, en este caso el Alluvione de 1966. A mi me ha gustado, la he disfrutado, pero siento que con esta autora, al igual que con otro puñado muy escogido, no puedo ser objetiva, me enamoró con su primera novela y sigo siendo una incondicional de su prosa poética, de su narrar bello y armónico, así que si he conseguido picar tu curiosidad tendrás que saciarla con alguna de sus novelas. Cada una de ellas es diferente, todas tienen ingredientes comunes, sin embargo la salsa y el aliño las hacen completamente distintas.
Sinopsis
Ella es un escritora de renombre, tras sufrir un accidente en el que ha perdido a su marido y su hija, a pesar de que la policía no ha sido capaz de encontrar los cuerpos, se ve incapacitada para escribir. Alejada de sus familia desde una edad temprana vuelve a recibir cartas de su madre a raíz del fatídico hecho que cambia su vida. En una huida hacia adelante vuelve a Firenze en pos de una historia que su padre le contaba de pequeña y que su madre en una carta le ha recordado. En el paquete que recibe, encuentra un diamante en forma de lágrima que hubiera podido salvar a la familia de la pobreza y la página de un diario que su abuela poseyó de niña. En Florencia no encuentra la felicidad que esperaba, da palos de ciego en la búsqueda del diario y todo le recuerda a su hija y marido desaparecidos. Su vida se convierte en una constante búsqueda en la que la Otra un ser siniestro y maltratador que se encuentra en su interior toma demasiadas veces las riendas de su vida y no le deja ser ella misma. En un intento por huir de su soledad crea un personaje enigmático, La Donna di lacrima, una mujer bella que recibe hombres en un ático de la via Ghibelina. Estos le cuentan sus penas y la acarician con algún objeto. Como no puede escribir se dedica a restaurar libros y a visitar un librería de viejo en la que se siente feliz, rodeada de tantos enfermos como ella denomina a esos libros deteriorados, el librero es un personaje enigmático, solitario y frío, que empieza a cortejarla de lejos, sin dirigirle la palabra, simplemente la espía y le ofrece aquello que sabe que le gusta. Sus caminos se cruzaran y la enfermedad se apoderará de Ella sin remedio. La compañía que se procuran supone un bálsamo para sus heridas. Ella soluciona sus rencillas con la otra de la única manera que sabe, pero consigue liberarse de su carcelera. Una vez restablecida vuelve a escribir, esta vez ya no con seudónimo.
El ovillo se va desenredando, conforme avanza la lectura, nada es lo que parece, y al final el giro te deja con una duda, que la misma Ella se encarga de despejar, y tu puedes interpretar a tu manera. Por si no os ha quedado claro para mí altamente recomendable, aunque debo avisar que es por ese rayito de esperanza cuando la oscuridad se ha apoderado de los personajes, y por la forma elegante en que trata el tema de la soledad y sus consecuencias...