Es evidente la importancia que tiene nuestra imagen hoy día. Ya sea por trabajo o por nosotras mismas, nos tomamos nuestro tiempo en cuidarla: elegir la ropa adecuada según la situación, incluso el perfume, combinar colores, decidir la crema corporal, el maquillaje y muchas cosas más. Si nos quedamos sin nuestra crema facial habitual por despiste nos sentimos desnudas (nos han repetido hasta la saciedad no salir de casa sin aplicarnos mínimo la hidratante!). Si podemos pensamos en hacernos la depilación láser, un tratamiento estético de cabina básico como por ejemplo una limpieza profunda, o unas sesiones de dieta proteinada para perder esos kilos que cogimos en Navidad... Y cuando llegue el momento no descarto unos toquecitos de Botox natural o ácido hialurónico para hidratar mi piel. Por supuesto me escapo al Gym en cuanto puedo o realizo regularmente deporte al aire libre. Cuidar nuestra imagen nos da seguridad, nos gusta, y cuidarnos forma parte de nuestra rutina y modo de vida en mayor o menor medida.
Pues bien: el párrafo anterior está escrito en femenino, pero... ¿sabes que íntegramente es también aplicable en masculino?.
Según un estudio realizado por One Poll (empresa dedicada a realizar estudios de mercado) el 25% de los hombres se realizan tratamientos de belleza ya sean faciales, masajes o manicura, al menos una vez cada dos semanas. Actualmente también para ellos es un gesto rutinario el aplicarse una crema facial específica o de tratamiento al igual que un antiojeras.
En cuanto a los tratamientos de Medicina Estética también han dejado de ser terreno exclusivo de la Mujer. Desde hace unos años se ha advertido un crecimiento exponencial del interés
En relación a las consultas sobre tratamientos corporales, cada vez más hombres preguntan por la eliminación de obesidad localizada, especialmente en abdomen y flancos, aunque a la cabeza continúa la depilación láser.(Fuente: www.seme.org).
Y por cerrar el círculo, en cuanto a tratamientos de cirugía estética o plástica, desde hace años el rey es el implante capilar debida a la preocupación masculina por la calvicie, pero han subido como la espuma entre los hombres la liposucción, blefaroplastia (o cirugía de los párpados) y rinoplastia. Casi un 25% de las operaciones de cirugía plástica y estética que se realizan en España son practicadas en hombres.
La conclusión es sencilla: nos gusta estar bien independientemente de si somos hombres o mujeres. Como siempre, con mesura y sin perder la perspectiva, cuidar el aspecto externo para gustarnos y gustar más sin dejar de cultivar nuestro interior es la clave para vivir más motivados y mejor.
Y tu Chico: ¿qué crema utiliza? 😉
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