Emociones. Ejercicios para trabajar el auto-sabotaje del niñ@ interior

" Nos cuesta tanto aceptar nuestros errores, porque nos han condicionado de niñ@s a recibir cariño solo por nuestros aciertos".
(David Fischman)

EMOCIONES

Ejercicios para trabajar el Auto sabotaje del niñ@ interior


  CRECER significa asumir la responsabilidad total de amar y educar satisfactoriamente al Niño Interior que habita en la profundidad de tu ser.  Nos fatigamos realizando esfuerzos por controlar lo incontrolable, nos maltratamos e ignoramos la responsabilidad que tenemos con nosotr@s mism@s y que sí podemos controlar.  Tus relaciones reflejan la calidad de la relación que Tú mantienes contigo mism@.  
  Si tus padres te ayudaron a expresarte de una forma sana cuando tu mundo se estremeció debido a experiencias difíciles o desalentadoras, probablemente hayas acumulado poco dolor para tu vida actual y futura.  

  Educarse a sí mism@ para alcanzar el éxito significa sencillamente enfrentar al Saboteador que habita en ti y dominarlo. Se trata de un emocionante viaje hacia la aceptación de un@ mism@, hacia la total responsabilidad y el enriquecimiento personal. El Saboteador tiene sus aspectos valiosos. Te ayuda a encontrar tu fuerza, a conocer tu vulnerabilidad y a descubrir la esencia de tu poder y de tu responsabilidad para que seas capaz de hacerte cargo de tu vida.  

EJERCICIOS

OBSERVAR AL SABOTEADOR/A:
 El primer paso para detener el auto-sabotaje es tomar la decisión de vivir y ser lo que en realidad es. Tu meta no es desembarazarte del Saboteador sino domesticarlo y aprovecharse de su energía y creatividad para que deje de ser un enemigo y se transforme en un aliado.  

El segundo paso es la IRA REPRIMIDA:  

  La ira nos anuncia que tenemos la necesidad de expresar de algún modo que nos sentimos herid@s, que nadie atiende nuestras necesidades y deseos, que se ignoran nuestros sentimientos y que se han violado nuestros límites. Lo que comienza como un auto rechazo en el esfuerzo por ignorar la ira, termina en relaciones frustradas, divorcios, jaquecas y migrañas, úlceras, diarrea u otras enfermedades. Ofrecemos al Saboteador un arma poderosa para que la utilice en contra de nosotr@s mism@s cuando negamos al Niñ@ Interior y sofocamos la cólera en vez de aprender a expresarla, aclararla y liberarla. Cuando le permitimos actuar fuera del campo de nuestra conciencia, el Saboteador utiliza la cólera reprimida para destruir nuestros sueños, minar nuestras relaciones y dañar nuestra salud física. Después de descargar nuestra ira y observar el daño que hemos hecho a las personas que hemos atacado, experimentamos remordimiento y horror por la intensidad y el carácter destructivo de nuestros sentimientos. Aprender a reconocer la cólera cuando la experimentamos es el primer paso para dominarla y controlar su expresión sin la intervención del Saboteador Interno. 

  Recuerda que tu intención es aprender a expresar tu ira con eficacia, ya que hacerlo de un modo destructivo es tan problemático como no expresarla en absoluto. La ira es una herramienta poderosa para conocerse más. Al aceptarla y aprender de ella, verás con claridad quién eres y qué es lo verdaderamente importante para ti. Tu ira te ayuda a conocerte y respetarte. Con frecuencia, lo que te lleva a enfadarte con los demás refleja algo que tú temes y que no logras reconocer en ti mism@. Cuanto más te aceptes sin juzgarte ni rechazar tus partes humanas menos perfectas, menos cólera experimentarás en relación con las demás personas cuando te muestren sus imperfecciones.

  Tu educación en relación con la ira se inició cuando eras un bebé. La forma en que tus padres reaccionaron ante tus ataques de ira han sido esenciales para tu desarrollo. Si ellos fueron tolerantes con su propia ira y capaces de experimentarla y expresarla adecuadamente, seguramente no se alarmaron al presenciar que sus hijos se encolerizaban.Con toda certeza reconocieron sus sentimientos sin temor e iniciaron el proceso de enseñarle cómo conducir estos poderosos sentimientos de una forma constructiva y apropiada. “Comprendo que estés enfadado. No hay ningún problema, puedes enfadarte, pero no está bien que intentes pegarme cuando estés irritado”. “Enfadarse no es algo malo, pero no deberías interrumpir la cena.
   Si por el contrario no reconocieron esos sentimientos en ellos mismos, probablemente no sabrían enseñarles a sus hijos a conducir de una forma constructiva y apropiada el sentimiento de la IRA. 
"La actitud que asumieron tus padres en relación con la ira son la clave de lo que tú aprendiste sobre esta emoción cuando eras niñ@". Resumiendo: 
  Tu niñ@ interior actuará a través de ti de las mismas formas que tú utilizabas cuando eras pequeñ@ para llamar la atención de tus padres. Se irritará por cualquier cosa, hará que se originen peleas sin motivo y que pierdas el control , se estará días sin hablar con alguien.etc. No lo hace a propósito, es el único mecanismo que tiene y conoce para defenderse y ayudarte a recuperar el equilibrio. Metafóricamente es como si tuvieras a un niñ@ pequeñ@ encerrado en una habitación y es tu responsabilidad encauzar su energía para que no se sienta sol@.
  Si haces por querer y mimar esa parte de ti, te dará las claves para tu bienestar total.
TE PROPONGO UN EJERCICIO:


Adóptate, Imagínate que te adoptas a ti mism@ cuando tenías unos 7 u 8 años y a partir de aquí, la  felicidad de ese niñ@ depende de ti y necesitáis establecer una relación de comprensión y confianza mutua. 
Tu objetivo es convertirte en la madre/padre más amoros@ que puedas ser.
  Le hablas, haces cosas que le gustan, le crees un lugar seguro para cuando no puedas estar por él/ella.
  Puedes mantener diálogos utilizando las dos manos _ con la que escribes normalmente le preguntas, con la que no escribes normalmente dejas que te responda_.  Cinco minutos al día de esta comunicación serán suficientes para que recuperes tu brillo interior y los beneficios colaterales te sorprenderán muy gratamente. Haz las paces con tu niñ@ interior, reconoce tu ira y aprovecha ese potencial. 

 Tu y tu niñ@ interior os merecéis un reencuentro poderoso.



* Textos del libro Auto-Sabotaje de Martha Baldwin