- Producimos más dopamina (supera los efectos de los tranquilizantes)
- Mejora nuestro rendimiento cognitivo, es decir, pensamos mejor y con más claridad. Nos ayudan a crear nueva información y a ser más creativos. La forma de procesar la información es más rápida y global.
- Favorecen nuestra motivación
- Nos ayudan a crear y mantener nuestra red social.
- Disminuyen los efectos de las emociones negativas
- Mejoran nuestra resistencia al estrés y nos ayudan a desarrollar estrategias de resolución de conflictos.
- Mejoran nuestros recursos físicos (nos sentimos mejor), sociales y psicológicos (optimismo, resiliencia, orientación hacia objetivos, etc.)
- Aumenta nuestra satisfacción, autoestima, autoconcepto y autonomía (capacidad de elección y decisión)
- Mejora nuestro funcionamiento cardiovascular, hormonal e inmunitario, lo que se traduce en más salud y una vida más longeva.
- Aumenta el bienestar.
Con todo esto, creo que vale la pena cultivarlas. ¿Y tú?