Empezando el curso de masaje en De Monitos y Risas

Por Facebook o Twitter ya sabréis que este fin de semana empezábamos a asistir al curso de masaje para niños a partir de un año que De Monitos y Risas organiza en la tienda Cucu-trás.
En febrero comenté que le había cogido gusto al masaje de bebés después de que me lo recomendaran en AT. La verdad, ha sido el gran descubrimiento de los últimos meses en lo que a relacionarnos se refiere. Me encanta ese momento de intimidad, de comunicarnos de forma no verbal...
Hasta el momento, lo había hecho de forma autodidacta, intuitiva. Pero tenía ganas de aprender de verdad, más en profundidad. Estuve buscando cursos o talleres y no encontré nada, todos estaban dirigidos para bebés bastante más pequeños que el mío. Fue Eloísa, de Una Maternidad Diferente, quien me puso sobre la pista de este curso. ¡Gracias!.
La sesión de hoy ha comenzado contando nuestras expectativas sobre el masaje y con un poquito de teoría sobre lo que íbamos a hacer en las próximas sesiones. Esta mañana sólo hemos estado dos familias, estábamos como en el salón de nuestra casa, un gustazo. El nene ha podido estar un buen rato jugando con una "caja de los tesoros" y después hemos pasado a hacer los pases en las piernas. Yo con el nene y mi marido con un muñeco (a ver si otro día os cuento la historia de cómo el Nenuco llegó a nuestras vidas...). No ha sido el día que más lo ha disfrutado porque estaba inquieto por la novedad del sitio, de los objetos para jugar y de la otra nena, pero no se nos ha dado nada mal. 
Para concluir, hemos estado un rato charlando sobre nuestras inquietudes acerca de la maternidad (en general, no ya sobre el masaje). Y, me reitero, esto de los Grupos de Madres hace falta como el comer, es imprescindible que empecemos a comunicarnos, a buscar espacios dónde expresarnos... En cierta manera, que salgamos del armario. Así que os reitero mi invitación para el día 30 de marzo en Baby Deli en el CC Zielo, allí os estaremos esperando.
He salido súper contenta de esta primera sesión. Me he sentido muy cómoda, relajada, en un entorno donde compartir el mismo enfoque de la crianza y estoy segura de que vamos a aprender y a disfrutar un montón con el masaje y los juegos. Ha sido un gran acierto.
Os iré contando qué tal nos va, ¡esto promete!.