No sabes lo que es correr, hasta que no sales a la calle e intentas trotar durante más de 5 minutos sin parar. El primer día sales tan feliz a la calle, con esa sensación de "yo puedo hacerlo" y cuando arrancas los 100 metros piensas que debes llevar al menos 1 kilómetro de distancia.Empezar a correr es duro.Sin embargo, si superas ese primer día y tu autoestima no anda por los suelos, querrás volver a repetir (más por orgullo que por placer) para comprobar si eres capaz de correr 1 kilómetro sin acabar como si te hubiesen metido en una secadora centrifugadora. Si en algún momento del día, tienes ganas de salir para comprobar si eres capaz de igualar tu marca o superarla...Enhorabuena. Te ha picado el bicho del running.El mejor consejo que pueden darnos, es que lo que hagamos lo disfrutemos. Ya sé que salir a correr, a montar en bici, a jugar a fútbol o a hacer dominadas no lo disfrutas, lo sufres. Pero la recompensa por saber que eres capaz de esforzarte y superarte hay que vivirla para entenderla.Da igual que piensen que corres muy despacio. Da igual que no levantes más de 5 kilos de peso. No importa que no tengas tanta flexibilidad... Lo que te diferencia del resto, es que tu sí Mueves el Culo del sofá y te esfuerzas por mejorar con independencia de lo que hagan los demás.