Todos los caminos conducen a Roma y en mi caso, tarde o temprano vuelvo a retomar aquello que me hizo feliz. Desde que comencé este blog en 2014 he vivido un sinfín de cambios vitales. Muchos me han acercado al mundo del Running y otros, han terminado alejándome de su vertiente más pasional. Atrás quedan los años de la locura del Maratón, del frikismo por los 101 de Ronda, del postureo de la GoPro y de las Carreras Populares cada fin de semana.
He borrado prácticamente las 465 entradas que había escrito. Cientos de miles de palabras lanzadas a la red durante años. Las más importantes (por supuesto), se mantendrán en una carpeta confinada de mi propiedad privada. Las otras...bueno, no han tenido tanta suerte. Sea como sea, toca reciclarse y volver a recuperar las ganas de escribir y de "volver a correr a lo grande".
No os penséis que durante estos años he parado de hacer deporte. Ni mucho menos. El boom del running supuso un antes y un después en la vida de muchos. Algunos, con el paso de los años lo han ido dejando. Otros (entre los que me incluyo), encontramos algo más que una moda pasajera. Encontramos un estilo de vida, una disciplina para mejorar, una forma de estar más sanos o de liberar tensiones del día a día...y por eso, no hemos dejado de correr. Sin embargo, ya no se vive con tanta intensidad.
Y partiendo de estas ideas, comienzo de nuevo a escribir para esta web. Desde la madurez de un corredor que lleva casi una década trotando. Con la tranquilidad de saber de lo que estoy hablando, no sólo por experiencia si no también por profesionalidad (hace tres años que me convertí en Médico) y sobre todo, sin las presiones por conseguir absolutamente nada. Escribir por escribir. Hablar sobre Running por el placer de hacerlo y disfrutar de este rinconcito (que bien podría haber desaparecido, pero que prefiero seguir disfrutando con aquellos que lo deseen). Así que: bienvenida, bienvenido. MedRunning, ha vuelto a la palestra.