La claridad tranquiliza, ayuda con los ánimos y previene la procrastinación.
¿Qué haces tú para empezar el día con las ideas claras?
Tres preguntas para empezar el día con las ideas claras: QUÉ, POR QUÉ y CÓMO
El día arranca y te plantea misiones variadas. Unas son más importantes que otras.
Quieres elegir bien. Así aparece la primera pregunta, la que va a decidir qué entra y qué se queda fuera de este día.
1. Decide qué
Algunos "qués" están decididos de antemano. Vas a trabajar, a estudiar o a atender otros menesteres cruciales que has elegido antes.
Pero también hay misiones que te salen al paso. Algunas no las conoces al momento de levantarte de la cama. Otras, sí. Y esas puedes escogerlas conforme te arreglas para pasar a la acción.
Decide el rumbo del día. Además atender tus misiones intocables, ¿ qué vas a hacer hoy?
2. Date un porqué
Las misiones de tu día están ahí por una (buena) razón. ¿Cuál es?
- ¿Por qué vas a ir a trabajar?
- ¿Por qué quieres ir a esa reunión familiar?
- ¿Cuál es la razón por la que quieres leer un rato esta tarde?
Si te pasa como a mí, preguntarte el porqué será un buen filtro.
Pondrá en relieve las misiones cruciales, quitará de en medio actividades que te aportan poco y te ayudará a decidir si te ocupas (o no) de lo que surja espontáneamente mientras navegas el día.
Además, es una pregunta muy motivadora. Recordarás el motivo por el que un día decidiste hacer determinadas tareas de continuo. Y eso influirá en tu buena disposición para encararlas.
3. Dite el cómo
Esta pregunta también sirve de filtro. Te fuerza a adaptarte a las circunstancias y a ceñirte a los recursos con los que cuentas: tu tiempo, tu energía... Son limitados y habrás de repartirlos entre lo que elijas.
La mayoría de las veces, no existe una sola manera de hacer las cosas. Huye de lo perfecto y encuentra una opción que te permita avanzar en lo que tú has decidido que es importante.
Poniéndonos en lo peor, quizás no salga bien. Puede que hoy no encuentres el cómo hacerlo, que no tengas los recursos o que los imprevistos te desbaraten los planes.
Pero, si sigues pensando en cómo hacerlo, darás antes con una opción, que si no piensas en ello o lo descartas refugiándote en la comodidad de la queja.
Y ahora... empieza el día
Decidir qué vas a hacer hoy, por qué y de qué manera, es empezar el día con las ideas más claras. Es empezarlo más consciente y más motivado.
Te da claridad, incluso si solo dedicas unos instantes a dibujar el día en la cabeza mientras te tomas un café.
Lo opuesto, no pensar en nada y dejarte llevar por lo que surja en el día, suena espontáneo o romántico. Pero, persistiendo en esa actitud, no conectas lo que haces que suceda con lo que más te importa.
Ahí tienes la idea, por si la consideras.
Fuente https://tusbuenosmomentos.com/empezar-dia-ideas-claras