Revista Viajes

En barco por el Lago di Como

Por Planea Mis Vacaciones @planeamisvacas

Segunda parada: Lago di Como

Si hace un par de semanas te hablaba de nuestra experiencia en Milán, la gran ciudad, en este post te quiero contar nuestra visita al Lago di Como, en plena naturaleza y rodeado de pequeños pueblecitos pre-alpinos.

No sé si era el encanto de Italia, el paseo en barco, las casas espectaculares que rodean el lago, los pintorescos pueblos colgados de las montañas o pensar que George Clooney podía asomarse en cualquier momento desde una de las ventanas de las mansiones que estaba viendo, pero la sensación de “oh madre mía” era incesante.

Lago Como desde Cernobbio

Fue una visita express, como casi todo en este viaje, ya que teníamos que repartir el tiempo entre ver un montón de cosas y estar con la familia, pero lo hicimos muy bien. O eso creo.

Llegamos en coche desde Varese por una carretera infernal. Sólo están separados por 20 km, pero se tarda unos 45 minutos en llegar.

Aparcamos en el “Parcheggio Centro Lago“, un parking de pago muy cercano al centro de Como y al puerto. Un poco caro, pero como todo en esta zona.

Un paseo en barco por el Lago di Como

Lo primero que hicimos fue acercarnos a ver los horarios de los barcos, y aunque la señora que estaba en la taquilla no era muy simpática, nos recomendó el tour de una hora por el lago. Genial.

Puerto de Como

El barco sale de Como y recorre una pequeña parte del lago, con paradas en los pueblos de Tavernola, Cernobbio, Moltrasio, Torno y Urio. Puedes subirte y bajarte cuando quieras, visitar un pueblo, todos o quedarte la hora que dura el recorrido en el barco. 

El precio del tour es de unos 9€ por persona. Hay otros tours diferentes, puedes ir en exclusiva a un pueblo o puedes hacer un recorrido por todo el lago que dura varias horas.

Mapa Lago di Como

Nosotros decidimos bajarnos solo en un pueblo y elegimos Cernobbio. Recorrimos el casco histórico, más cercano al lago, con calles muy estrechas, casas de colores de no más de 2 plantas, contraventanas y flores. Idílico. Nos cruzamos con dos o tres personas en nuestro recorrido, todo lugareños.

Se nota que es un lugar veraniego, ya que en la zona en la que desembarcamos había hoteles, restaurantes, tiendas… todos cerrados.

728x90_Cruceros_Campaña

En el camino nos encontramos con la Chiesa di San Vincenzo, una iglesia del siglo XII, pequeña y modesta por fuera pero con un interior precioso. De estas iglesias que te encuentras por Italia en cualquier esquina y te dejan con la boca abierta.

Hacía bastante frío y nos apetecía tomar algo calentito, así que entramos en la Pasticceria Poletti, un descubrimiento. Os dejo la ubicación por si os pasáis por allí, un gustazo. Teníamos antojo de capuccino, así que nos pedimos uno bien calentito acompañado de un cruasán con chocolate riquísimo (aunque nos costó decidirnos, todo tenía una pinta estupenda) en una salita de té monísima. Tenía una terraza muy bonita, pero hacía mucho frío para desayunar a temperatura ambiente.

Pasticceria poletti Cernobbio

Los barcos pasan cada media hora, así que es muy sencillo controlar los horarios para seguir con las excursiones. En total nos paramos una hora. Así que si te pararas en todos los pueblos, más el tiempo en Como, más la hora del recorrido, al final puedes pasarte un día genial por 9€.

Volvimos al barco e hicimos el grueso del recorrido, unos 40 minutos aproximadamente, ya que Cernobbio era la segunda parada. Ahora tocaba pasar por Moltrasio, Urio y Torno (sin bajarnos) antes de llegar a Como. 

Hacía bastante frío, pero fuimos valientes e hicimos todo el recorrido en cubierta. No se pueden desperdiciar las vistas del tour, aunque ya no sientas las manos y tengas los labios morados… no hay excusa. Grabé un pequeño vídeo del recorrido, ¡aquí lo tienes!

Teníamos algo de prisa así que, una vez ya en Como, dimos un paseo rápido por la zona cercana al parking, tiendas carisísimas, la Piazza del Duomo y la Catedral. Ya estaban montando las casetas de madera de un “mercatino di Natale”, pero nos quedamos con las ganas.

Era la hora de comer, así que empezamos a dar vueltas buscando algún lugar donde vendieran pizza al corte, y descubrimos un sitio llenísimo de gente (no turistas) y allí nos metimos. “Il pane di Tina Beretta”. Un horno de toda la vida con dos secciones, una de panes, dulces, etc, y la otra de pizzas, empanadas, calzones, etc. Todo al peso.   Te lo preparan en una bandejita, con tenedor y cuchillo de plástico y envuelto en papel. Tres raciones enormes de pizza para llevar por 11€


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista