Revista Viajes

▷ En busca de frailecillos en Mykines, Islas Feroe

Por Jose Ortiz @mejorepoca

Viajamos a Mykines, la isla más occidental de las Islas Feroe, en busca de sus famosos frailecillos.

"No tenemos mal tiempo", dice el sitio web de las Islas Feroe.

"Sólo un montón de tiempo".

A la deriva en el Océano Atlántico, a medio camino entre Islandia y Noruega, las 18 islas de las Islas Feroe sí tienen clima. Es palpable aquí: una presencia siempre inminente que arrebata la puerta de su auto, golpea contra su ventana y llora agazapada en tranquilos momentos de calma.

El clima sería adecuado si las noches fueran largas y oscuras, pero, en junio, la puesta del sol es casi medianoche y el crepúsculo misterioso solo se suma al enigma de estas salvajes islas del Atlántico.

Hay mucho que hacer aquí, desde caminatas de clase mundial hasta buceo con traje seco, pero primero en nuestra agenda fue ver frailecillos en Mykines (pronunciado meech-ih-ness), la isla más occidental de las Islas Feroe.

Mykines o Vestmanna Bird Cliffs?

Cada visitante quiere saber dónde ver frailecillos en las Islas Feroe. Estábamos divididos entre los Acantilados de aves de Vestmanna y Mykines, ambos conocidos por una gran cantidad de aves, como frailecillos, guillemots, razorbills, fulmars, kittiwakes y gannets.

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Atlas y botas Frailecillos en Mykines, Islas Feroe

Después de investigar en línea y hablar con los lugareños, parecía que el mejor lugar para ver frailecillos en las Islas Feroe era Mykines, por lo que reservamos dos boletos de último minuto en un ferry adicional. (Nota: reserve con anticipación sus boletos si realmente desea ver frailecillos en las Islas Feroe, ya que los ferries adicionales no siempre funcionan).

Frailecillos en Mykines, Islas Feroe

Descendimos en Mykines con modestas expectativas. Habíamos visto de cerca imágenes impresionantes de frailecillos, pero asumimos que fueron tomadas con un teleobjetivo. Acordamos no dejarnos también decepcionado si no vimos frailecillos en Mykines. Después de todo, esta isla descuidada, con sus coloridas viviendas, sus acantilados azotados por las olas y sus espumosas vistas al mar, era completamente engañosa por sí sola.

Atlas y botas

Sin embargo, en secreto, ambos sabíamos que estaríamos aplastados si no viéramos frailecillos aquí. Dada la lejanía de las Islas Feroe, era poco probable que regresáramos, así que esta fue nuestra única oportunidad.

Partimos en una caminata redonda de 6 km hasta el faro de Holmur en el islote de Mykineshólmur. Alrededor de 15 minutos, Peter señaló un acantilado. Allí, sentado solo, había un colorido frailecillo. Lamentablemente, no esperó mucho, pero el breve vistazo hizo que nuestras esperanzas fluyeran.

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Atlas y botas Un puffin pan en Mykines, Islas Feroe

Mientras caminábamos, vimos uno o dos frailecillos saltando por el césped, deteniéndose el tiempo suficiente para permitir una foto o dos.

Justo antes del puente a Mykineshólmur, pasamos por un área llamada Lambi. Aquí, encontramos docenas de frailecillos descansando en el sol que se desvanece.

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Atlas y botas Un grupo de frailecillos en Mykines, Islas Feroe

Llegamos un poco demasiado temprano para la temporada de anidación que se extiende desde mediados de junio hasta agosto, por lo que la mayoría de los frailecillos aún estaban en el mar. De hecho, cuando hicimos una pausa y miramos hacia el mar, vimos cientos de personas en el agua. Lamentablemente, a cierta distancia, no eran muy perceptibles, pero nos dio una idea de lo que se puede ver a mitad de temporada cuando los frailecillos se dirigen a tierra.

Los frailecillos de las Islas Feroe se reproducen en colonias en laderas empinadas y cubiertas de hierba donde cavan madrigueras de anidación. Verás estos agujeros por todo el suelo, por eso es importante que nunca te alejes del camino. Mykines es la isla más frágil de las Islas Feroe y, por lo tanto, los visitantes deben seguir pautas estrictas (consulte la sección "Consejos" a continuación).

Pasamos un rato tomando fotos (a los excursionistas se les pide que no se queden en la colonia) y continuamos hasta el faro. Allí, nos detuvimos a comer nuestro almuerzo. Vale la pena señalar que siempre debes vigilar tus alrededores. En un baño justo debajo de nosotros, tres frailecillos se detuvieron para charlar. Ninguno de los otros excursionistas lo notó y logramos capturar algunas de nuestras imágenes favoritas.

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Por supuesto, los frailecillos no son las únicas aves que frecuentan las Islas Feroe. Un total de 305 especies han sido registradas aquí. De ellas, alrededor de 50 especies se reproducen regularmente en las islas, en parte debido a su absoluta lejanía; ¡No hay otra tierra cerca!

Esto puede ayudar a explicar el atractivo único de las Islas Feroe. Tienen un aeropuerto internacional, un excelente sistema de carreteras e incluso Google Street View. Pero paralelamente al avance tecnológico, mantienen firmemente una forma de vida tradicional. Hay poca globalización aquí y aunque esto puede cambiar un día pronto, por ahora, las Islas Feroe siguen siendo una tierra mágica de frailecillos, sol de medianoche y copiosas cantidades de clima.

Consejos para visitar Mykines

  • En primer lugar, lea y respete la guía sobre frailecillos, observación de aves y excursiones en Mykines. Vimos a dos personas vagando entre las madrigueras a pesar de las instrucciones para nunca dejar el camino.
  • Optar por el ferry en lugar del helicóptero a Mykines. El ferry ofrece mejores vistas de las islas, se puede reservar como un viaje de un día (el helicóptero no puede) y libera espacios de helicópteros para los locales que lo utilizan como medio de transporte.
  • Reserve sus boletos con anticipación ya que generalmente se agotan. Apunte a visitar al comienzo de su viaje para que, si se cancela el ferry, tenga una segunda oportunidad. Tenga en cuenta, sin embargo, que la cancelación no le da acceso prioritario a los transbordadores posteriores.
  • Use un montón de capas y empacar un sombrero, guantes y una bufanda. Incluso las temperaturas de verano pueden ser arriesgadas.
  • Si sufre de mareo por movimiento, es posible que desee tomar medicamentos.
  • Si no está seguro de la hora de recogida de Mykines, ¡vuelva a verificar con la tripulación!
  • Tome un almuerzo para comer en Mykines ya que no hay provisiones en la isla. Ahí es una pequeña cafetería que ofrece pasteles y bebidas calientes, pero también vale la pena tomar un sándwich.
  • Tómese su tiempo en la caminata de 6 km hasta el faro de Holmur en el islote de Mykineshólmur. Según el horario del ferry, tendrá alrededor de seis horas en Mykines. Caminamos hasta el faro, comimos nuestro almuerzo para llevar, caminamos de regreso a la ciudad, comimos pastel y café y aún nos faltaba una hora.
  • Dicho esto, no te detengas en la colonia. Nunca se desvíe del camino y tenga cuidado de no pisar las madrigueras de los frailecillos (pequeños agujeros en el suelo). Esto es muy importante ya que los frailecillos anidan debajo del suelo justo al lado del camino.
  • Es fácil quedar atrapado en tu búsqueda de frailecillos. Tómese un tiempo para disfrutar de las innumerables aves de la isla, así como de su extraordinaria belleza natural.
Atlas y botas

Mykines, Islas Feroe: lo esencial

Qué: Buscando frailecillos en Mykines, Islas Feroe.

Dónde: Nos alojamos en The Old Millar House, una encantadora casa de campo a 1 km del centro de la ciudad. La casa es cálida y acogedora, con un techo de césped tradicional y acceso a un jardín tipo gruta. Hay una playa a unos metros de distancia (¡aunque podría ser demasiado frío para nadar!) Y el río Sandá pasa prácticamente por la puerta. Si está interesado en probar la vida nocturna de las Islas Feroe, es posible que desee estar más cerca del centro, pero para aquellos que deseen retirarse a las agradables veladas, la Old Millar House es una excelente opción. Haga clic aquí para obtener un descuento en su primera estadía con Airbnb.

Cuando: La mejor época para visitar Mykines en las Islas Feroe es desde mediados de junio hasta mediados de agosto, cuando los frailecillos llegan a la tierra para anidar. Durante dos semanas a cada lado, es probable que veas algunos frailecillos, pero la mayoría todavía estará en el mar.

Cómo: Los ferris se ejecutan entre el puerto de Sørvágur (en Vagar) y Mykines durante los meses de verano. Esto toma 45 minutos y cuesta 60 DKK ($ 10 USD) por persona. Consulte mykines.fo para conocer el horario ("Plan de viaje") y reserve sus boletos con anticipación. Los transbordadores adicionales se pueden agregar en temporada alta a un costo mayor (desplácese hacia abajo en mykines.fo para ver si hay algún "Viaje Extra").

Los helicópteros también corren a Mykines (tyrla.atlantic.fo). Esta opción es sorprendentemente asequible, pero no se puede reservar como viaje de ida y vuelta en un solo día. Recomendamos tomar el ferry, ya que ofrece mejores vistas y libera espacios de helicópteros para los locales que lo utilizan como medio de transporte.

Los visitantes de Mykines también deberán pagar una tarifa de caminata (100 DKK / $ 15 USD por persona). Pagamos esto en el puerto de Sørvágur, pero hay planes para administrar el cargo en línea (mykines.fo).

Llegamos en coche a Sørvágur. Al acercarse al puerto, busque una señal azul que apunte a "Mykines" y sígala hasta el punto de partida que se encuentra más allá de la estación de gasolina de Effo. También hay un autobús que va desde la capital, Tórshavn, hasta Sørvágur.

Volamos a las Islas Feroe con Atlantic Airways.


Imagen principal: Atlas y Botas

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