Para la secretaria de la Mujer del sindicato en Cantabria, Laura Lombilla, esta medida, una de las reivindicaciones históricas de CC.OO, vendría a poner fin "a la injusticia clamorosa" que soportan quienes trabajan en este sector, casi todas mujeres y en una gran medida extranjeras.
Lombilla subraya, en una nota, que a la cifra de 3.100 personas habrá que sumar "muchas más" y confía en que, con la reforma, el número de empleadas que normalizan su situación crezca de forma importante.
A su juicio, su integración en el régimen general de la Seguridad Social abre un nuevo marco de relaciones laborales que les permitirá trabajar "más y mejor", pero además refuerza los espacios de afiliación y acción sindical para luchar contra la desprotección que ahora soportan muchas de ellas.
Considera también que esta equiparación de derechos cobra especial importancia en estos momentos de crisis, en los que el sector se ha convertido en el refugio de muchas mujeres que han perdido su empleo o necesitan compensar la pérdida de ingresos familiares.
Fuente