Esto fue hasta que descubrí el fascinante mundo de las suculentas.
Ahí si me siento una verdadera Sra. manos verdes.
Claro, si se reproducen con solo mirarlas y podes olvidarte de regarlas,total ellas son siempre tan agradecidas. Tan agradecidas que crecen en cualquier recipiente donde se me haya ocurrido plantarlas.
Una taza rota
Un dedal
O en un pote de helado
Incluso en mi última ocurrencia,el bolsillo del jean que me sobró de cuando hice estas fundas de almohadones.
Prometo hacer un stop y mostrarte algo diferente la próxima.
Pero los artistas dicen que no hay que abandonar un éxito.
y yo tampoco voy a abandonar esta racha de mano verde!
Como este proyecto es tan rápido y económico
como hacerse un par de fundas con las piernas de un jean,creo que va perfecto para el Finde Frugal
Jorge Luis Borges
Hasta la próxima!!