El último 9 de noviembre se convirtió en un día señalado para el interés histórico. Y es que por una parte se celebraba el 25 aniversario de la caída del Muro de Berlín. Recordemos que fue una construcción que dividió la capital alemana durante un par de décadas. Tuvo algo más que un carácter físico. Y es que era una barrera simbólica entre dos mundo, el comunista y el capitalista, que se midieron en lo que denominamos la Guerra Fría. Caminaban hacia un mundo teóricamente bípolar, pero que yo añadiría otro tercer bando, las víctimas. Y es que muchos de los conflictos que hoy continúan abiertos tienen su propio episodio en la guerra antes mencionada.

Imagen construcción del Muro de Berlín (Fuente)
La caída del muro de Berlin significó también un camino hacia la libertad, el entendimiento y la reconciliación. Un mensaje que claramente no se extendió. Y es que el ser humano es otro animal territorial.
Dicho esto, está claro que ese acontecimiento tiene un gran interés histórico. No me detendré a nombrar punto por punto, pero os recomiendo el especial que se ha realizado en la sección de historia de queaprendemoshoy.com, donde se trata el tema abordando varios aspectos, desde su construcción hasta las consecuencias de su derrumbamiento, ilustrando también el contexto. Yo he participado en una entrada sobre otros ejemplos de los muros famosos de la historia, algo que me conduce a la reflexión sobre el papel histórico que han podido desarrollar. No solo se trata de una separación física, sino que vemos también un símbolo de poder de unos sobre los otros. Si queréis saber más os invito a leer mi artículo del especial titulado Muros famosos de la historia: Dividiendo la Humanidad.
Por otra parte, el 9N también se dio el tema del famoso referéndum catalán. Y es que el tema de los nacionalismos también funcionan a base de “muros” que se usan para distinguirnos del resto de los seres humanos. No me pretendo mostrar favorable a ninguno de los dos bandos extremos. Si algo he aprendido en la carrera que me llevó a obtener la licenciatura en Historia, es que la opinar es un ejercicio diferente al de realizar una interpretación histórica de cualquier hecho. Lo que criticable es la selección manipulada de acontecimientos históricos para justificar cualquier determinación que se tome en el presente. Digamos que hoy en día se está escribiendo la historia, y en el mañana con la perspectiva del tiempo podemos interpretar la historia.
Os invito a comentar vuestras reflexiones y percepciones sobre el tema, aunque difieran de la que he aportado yo.
Un Saludo.
