En un partido donde abundaron las ofensivas y los touchdowns terrestres, Lamar Jackson se volvió el héroe del encuentro lanzando el balón.
Ravens y Browns tuvieron lo que podría ser el mejor partido de la Temporada NFL 2020 esta noche y fue un partido donde los ataques terrestres lucieron por ambos lados. De hecho, fue un partido de tintes históricos en este departamento, ya que se anotaron un total de nueve touchdowns por la vía terrestre:
This is the 3rd game in NFL history with 9 rushing touchdowns, tied for the most ever in a single game. Both other games happened in 1922
The @Ravens and @Browns became the 1st pair of teams in NFL history to each have 4+ rush TD in the same game
— NFL Research (@NFLResearch) December 15, 2020
Cleveland tuvo 138 yardas y cuatro anotaciones terrestres, encabezados por Nick Chubb (82 yardas, 2 TD), mientras que los Ravens acumularon 231 yardas y cinco touchdowns por esta vía, siendo Lamar Jackson el mejor de todos (124 yardas, 2 TD).
Curiosamente lo que le dio la victoria a los Ravens no fueron las piernas de Jackson, sino su brazo. Jackson tuvo que dejar el partido por unos minutos por lo que se anunciaron eran “calambres”, y durante su ausencia los Browns tomaron ventaja en el encuentro. Trace McSorley, el QB suplente de Baltimore, se lesionó tratando de correr y Lamar regresó corriendo de los vestidores para jugar la cuarta y cinco que tenían los Ravens. Y pasó esto:
GUESS WHO’S BACK. @lj_era8 #RavensFlock
📺: #BALvsCLE on ESPN
📱: NFL app // Yahoo Sports app: https://t.co/wVjLQzz43l pic.twitter.com/7ovsaDh4sv— NFL (@NFL) December 15, 2020
Ese pase puso adelante a los Ravens, y aunque Cleveland empató, Lamar Jackson volvió a lanzar en los minutos finales para conseguir acercar a su ofensiva y darle la oportunidad de ganar a Justin Tucker, que no falla en esos momentos.
Con esto los Ravens mejoran su marca a 8-5 y aún piensan en los playoffs, y la actuación de Lamar nos deja ver que en el fondo tiene las herramientas necesarias para ser un QB decente en la parte aérea. Y eso puede ser muy importante para Baltimore.
Mientras Lamar Jackson sea un jugador que corre el noventa por ciento de las veces la ofensiva de los Ravens será muy predecible, pero si es capaz de integrar pases a su juego entonces las cosas mejorarán notablemente, algo que le viene de maravilla a Baltimore con los playoffs tan cerca.
Aún es muy pronto para asegurar algo, pero hoy los Ravens pueden presumir que su QB ganó el partido usando lo que los quarterbacks normalmente usan: su brazo. Esto puede ser el principio de algo bueno para Lamar y Baltimore.