En la lucha contra el sida, apostemos por la inclusión

Actualmente y pese a la proliferación de los medios de comunicación y sitios donde la información es vasta, existen altos índices de tabús y desinformación en torno al Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH que deriva en SIDA), los mismos que impiden prevenirlo y/o tratarlo de manera adecuada, en especial a la hora de otorgar un trato digno a los portadores.La prevención ha de ser siempre el arma más poderosa contra cualquier enfermedad, por lo que es nuestra responsabilidad, primero, estar bien informados, segundo, evitar conductas que implican riesgo de contagio. Por otro lado, debemos evitar a toda costa la discriminación de los portadores, ya que se ha demostrado que el contagio (salvo el de transmisión sexual y otras vías) no incluye saludos y un trato amable; además, los avances médicos han logrado que los portadores tengan menos complicaciones así como prolongar la expectativa de vida.
En este sentido, es también fundamental que las autoridades garanticen un trato digno en los diferentes sistemas de salud y el acceso a los tratamientos que les permitan tener una vida productiva.