En una jornada de alta montaña, Nairo Quintana (Movistar) fue el más fuerte entre los favoritos. Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick Step) y Cadel Evans (BMC) flaquearon. La etapa fue para el joven Enrico Batagglin (Bardiani). Urán mantiene el liderazgo en la general, Quintana recorta valiosos segundos.
Etapa 14, de 164 km entre Aglié y Oropa, con cuatro puertos de montaña: La Serra (cat. 3), Alpe Noveis (cat. 1), Bielmonte (cat. 2) y final en Biella (cat. 1). El colobiano Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick Step) debía defender sus 37” de margen con Cadel Evans (BMC). El joven Rafal Majka (Tinkoff-Saxo) a 1′ 52” y Domenico Pozzovivo (Ag2r-La Mondiale) a 2′ 32” eran otros de los pretendientes. También era el escenario ideal para que Nairo Quintana (Movistar) intentara comenzar a recortar los importantes 3′ 29” que lo separaban aún de la maglia rosa.
El pelotón dejó hacer a la nutrida fuga (más de una quincena de pedalistas) hasta Bielmonte. Una vez allí subió el ritmo y el pelotón perdió por la cola a algunos pedalistas. A falta de 52 km para meta, las distancias entre unos y otros habían bajado de los 8′. De todos modos, mucho trabajo deberían hacer los gregarios de aquellos corredores con vocación de victoria de etapa. El volumen de corredores en la fuga garantizaba innumerables ataques antes de ser cazados por el pelotón.
A medida que el pelotón subió el puerto de Bielmonte, el margen con la cabeza de carrera bajaba rápidamente. Fue el momento en que Pierre Rolland (Europcar) atacó desde el lote mayoritario, acompañado de un gregario. A él le siguieron Gorka Izaguirre (Movistar) y Riccardo Zoiol (Trek). Poco después también se unió Ryder Hesjedal (Garmin-Sharp). Todos hicieron contacto con Rolland y su doméstico, persiguiendo a los fugados.
Stefano Pirazzi (Bardiani) y Nicholas Roche (Tinkoff-Saxo) también probaron sus opciones, atacando a lo largo del Bielmonte. Uno atacó desde el pelotón, formando junto a otros corredores un segundo grupo perseguidor. El otro atacó desde el lote de fugados ¿Sería el día del irlandés?
A falta de 33 km Roche mantenía 4′ 20” con el primer grupo perseguidor (Rolland) y 5′ con el segundo (Pirazzi) mientras el pelotón (Urán) rodaba ya decididamente enfilado, a casi 6′ del irlandés. Fue entonces cuando el campeón colombiano Miguel Ángel Rubiano (Colombia) se fue al suelo, fuera de la carretera, en la cola del pelotón.
Antes del último puerto, Roche fue neutralizado por sus ex-compañeros de fuga. Marco Quinziato (BMC) y Albert Timmer (Giant-Shimano) asumieron la cabeza de carrera. Quedaban 19 km para el final. Después los pedalistas pasaron por uno de los lugares emblemáticos del Giro. Allí donde Marco Pantani en 1999, puso pie en tierra para solucionar por sí mismo un problema mecánico y después ganó la etapa con inapelable superioridad. El mismo año en que una más que discutible prueba de dopaje lo dejó fuera del Giro cuando era líder.
Ya en el último puerto, a falta de 9,5 km para el final, un desperfecto mecánico acabó por sepultar las posibilidades de Quinziato. Detrás, el grupo perseguidor de Rolland y Hesjedal rodaba con firmeza. Fue entonces cuando del pelotón salió una vez más, el aguerrido Julián Arredondo (Trek). Su ataque produjo algunos cortes en el lote mayoritario aunque los favoritos para la general se mantuvieron bien posicionados. Quien se colocó a su rueda en la cabeza del lote fue nada menos que Nairo Quintana.
A falta de 4,6 km para que Timmer cruzara la meta. En el pelotón, Quintana aceleró el ritmo y dejó mal parado a Arredondo. A continuación, Movistar y Ag2r-La Mondiale tomaron las riendas del asunto. El pelotón se desgranó de modo inapelable. Pozzovivo, Majka, Quintana, Evnas y Urán se mantuvieron adelante.
Mientras Rolland y Hesjedal procuraban recortar diferencias con Timmer, atrás, en el grupo de favoritos, Ag2r-La Mondiale seguía ajustando la tuerca. Sin gregarios a mano, Urán debía resistir a rueda de Pozzovivo y Quintana. Cuando Pozzovivo también se quedó sin domésticos, atacó nuevamente. Sólo Quintana pudo responder. Urán aparentaba haberse quedado sin piernas. Parados sobre las palancas el italiano y el colombiano mantuvieron el ritmo y se alejaron del resto de favoritos.
Adelante, Darío Cataldo (Sky) y Jarlinson Pantano (Colombia) cazaron a Timmer a falta de 2 km. Rolland y Hesjedal aún no podían hacer contacto con la cabeza de carrera. Fue entonces cuando Cataldo atacó con fuerza. El colombiano pudo mantenerse a rueda y después fue él quien cambio de ritmo. Timmer no pudo seguirlos. En el último km, Cataldo y Pantano fueron cazados por el grupo perseguidor. Cataldo, Pantano y Enrico Batagglin (Bardiani) decidieron la etapa en esprínt a lo largo de una dura rampa final. Batagglin, de 24 años, fue el más fuerte y por media rueda le quitó la victoria a Cataldo.
Detrás, Quintana cruzó la meta por delante del resto de favoritos. Tras él lo hizo Pozzovivo y Majka. Valiosos segundos perdieron en cambio Evans y un exhausto Urán. Bastante detrás, arribó Ivan Basso (Cannondale) definitivamente fuera de competencia por la maglia rosa.
Así finalizó una de las etapas diseñadas expresamente en honor al gran Pantani. La organización del Giro lo hizo 15 años después de que lo expulsara a causa de una prueba de dopaje, que al día de hoy continúa siendo discutible (desde el punto de vista metodológico) y que significó el inicio de su trágico final (suicidio en 2004): ¿hipocrecia o redención? Lamentablemente, ya poco importa.
Clasificación de la etapa:
1. Enrico Batagglin (Bardiani)
2. Darío Cataldo (Sky) m.t.
3. Jarlinson Pantano (Colombia) a 7”
Clasificación general:
1. Rigoberto Urán (Omega Pharma-Quick Step)
2. Cadel Evans (BMC) 32”
3. Rafal Majka (Tinkoff-Saxo) 1′ 35”
4. Domenico Pozzovivo (Ag2r-La Mondiale) 2′ 11”
5. Wilco Kelderman (Belkin) 2′ 33”
6. Nairo Quintana (Movistar) 3′ 04”