Cuando vamos por el parque dando un paseo, caminamos sobre la Tierra. Al subir a una montaña y respiramos, se nos llenan los pulmones el Aire puro. Si nos sumergimos en las profundidades del océano, lo hacemos en el Agua. Y si acercamos nuestra mano a una vela encendida, la tenemos que retirar porque el Fuego nos quema. Miremos a donde miremos, los cuatro elementos están ahí, en la naturaleza y en nuestra vida cotidiana.
A raíz de esto, los elementos pueden estar tanto en los paisajes como en el arte y por supuesto, en la moda. ¿Dónde podemos encontrar el reflejo de los cuatro elementos? He escogido cuatro ejemplos de vestidos, mi prenda favorita, que podrían representarlos, cada uno con su personalidad y sus toques que lo hacen más personal. Los elementos nos inspiran, nos llevan por los caminos que el destino nos marca. Al escoger un corte o un color de vestido, también reflejamos nuestra personalidad, al igual que en la naturaleza, donde determinados paisajes pueden hacernos soñar.
1. Agua. Paisaje de Tenerife y vestido azul en corte de sirena, de Sherri Hill.
2. Aire. Catarata Santo del ángel, en Venezuela y vestido vaporoso, de Elie Saab.
3. Fuego. Volcán de Erta Ale, en Etiopía y vestido rojo, de Valentino.
4. Tierra. Gran Cañón del Colorado, en Estados Unidos y vestido en tonos tierra, de Dolores Promesas.
xoxo
Nerea