La filial de Podemos en Navarra recogía el sábado “el guante del alcalde de Batres (Madrid)”, pidiendo a los ayuntamientos de la Comunidad Foral que “se rebelasen ante el precio de la luz y dejasen de pagar la factura de las compañías eléctricas”. En un comunicado emitido por la formación en Navarra, este partido instaba a las corporaciones locales a que “prioricen sus servicios públicos antes que el pago de la factura de la luz”, y se declarasen por tanto “insumisos” y “dejen de pagar el recibo de la luz hasta que no bajen los precios”.
En un comunicado recogido por la agencia Efe, Podemos decía: “No puede ser que, ante el alza especulativa de los precios de la luz, haya entidades locales que estén valorando realizar recortes de personal y servicios a fin de pagar dichas facturas”. Pedía a todas las entidades públicas que “prioricen sus servicios públicos ante el afán expropiatorio del oligopolio eléctrico y se nieguen a pagar antes de realizar recortes presupuestarios”, y lo esgrimía con argumentos legales.
En este sentido la parlamentaria Ainhoa Aznárez avanzaba que Podemos estaba preparando distintas iniciativas a nivel local, “sabiendo que la ley prohíbe el corte de la luz por impago a las entidades públicas”, y preguntaba además al Gobierno de Navarra sobre los tipos de contratos y gastos que tiene adquiridos con este tipo de empresas. “Tenemos que pelear a todos los niveles posibles para conseguir atajar los precios de la luz”, sostenía, agregando que se trata de plantear desde acciones locales hasta propuestas de mayor alcance, como limitar, vía Real Decreto, el precio a la energía nuclear e hidroeléctrica o la creación de una empresa pública de energía.
Asimismo, reclamaba al PSOE que “cumpla con el acuerdo de gobierno” que ambas formaciones firmaron y que recoge, según precisa, la bajada de la factura de la luz “haciendo los cambios normativos necesarios para acabar con la sobre-retribución”. Aznárez denunciaba por último que PSOE y PP “privatizaran y liberalizaran este sector” que “beneficiaría” a los consumidores, pero ahora “las facturas están dejando a miles de familias con el agua al cuello”, mientras las eléctricas “no paran de recibir beneficios y se han convertido en el vergonzoso retiro dorado para militantes de estas dos formaciones”.